El uso abusivo de zapatillas deportivas puede causar malformaciones del pie

Hay chavales que no se quitan las zapatillas deportivas ni para dormir y es una de las peores cosas que pueden hacer por sus pies. Los podólogos, reunidos este fin de semana en San Sebastián con motivo de su congreso nacional, han advertido de que las conocidas como multitaco, muy de moda entre los niños porque las promocionan los futbolistas de elite, pueden provocar importantes malformaciones. La complicación más común es que «las uñas se traumaticen, se amoraten y se puedan perder», pero también resulta cada vez más frecuente que los dedos se acaben deformando y acaben tomando forma de garra, algo común entre las personas mayores, pero del todo anormal entre los críos.

«Al final, los responsable de que los niños lleven un calzado u otro son sus padres; pero hay que ser comprensivo», afirma el secretario del Colegio Oficial de Podólogos de Euskadi, Santiago Nieto. Lo ideal, según el especialista, sería que los chavales utilizaran fundamentalmente zapatos de piel, que favorecen una mejor transpiración y se amoldan a las condiciones físicas de cada pie. «¿Pero qué pasa que si le obligas a un niño a ir siempre con este calzado? ¡Que se convierte en el rarito de la clase! Y hay que ser consciente también de eso», se responde el especialista. «Yo creo que lo ideal es hacerles ver que han de combinar un calzado con otro y explicarles que abusar de las deportivas tiene consecuencias para su salud».

Los chavales buscan en las estanterías las zapatillas de sus ídolos deportivos, las de Messi, Cristino Ronaldo y similares. Quieren las de sus ídolos porque, en sus sueños -en buena medida a causa de la publicidad-, imaginan que con ellas meterán más goles que nadie. Las hay de dos tipos, de suela de goma, ideadas para andar con ellas a todo trapo, o con tacos, pensadas exclusivamente para jugar.

Ellas, con ruedines

Desde el punto de vista de la salud, ni unas ni otras son buenas para llevarlas un día sí y otro también. Según el podólogo vizcaíno, este calzado obliga a llevar los dedos muy ajustados, lo que favorece, además de malformaciones, una excesiva sudoración y una mayor propensión a la aparición de hongos y bacterias. «El pie tiene que estar cómodo y los dedos deben poder moverse ligeramente en su interior», aconseja.

Un 62% de los escolares, casi todos varones, acuden al colegio con un calzado específico para el fútbol, de horma estrecha, suela fina, multitacos y material artificial, según un estudio de la Universidad Miguel Hernández de Elche, dirigido por el podólogo Roberto Pascual. Tampoco las niñas llevan el calzado que debieran: un 11% acuden a los centros escolares con deportivas con ruedines acoplados.

Los datos de este trabajo, realizado con 600 chavales, resultan reveladores. A más de un tercio de ellos se les recomendó una revisión podológica. Tras la exploración clínica, un 40% (en total, unos 80) presentaba pies planos. «No todo pie plano, sobre todo en niños, supone una patología, pero es algo que hay que mirar», advierte el especialista.