Una jornada caótica marcada por las rectificaciones

El dicho 'donde dije digo, digo Diego' se ideó para jornadas como la de hoy. El protagonista, el Gobierno de coalición formado por el PSOE y Unidas Podemos. El tema, la salida de los niños a partir del 27 de abril, cuando comience la llamada 'desescalada' del confinamiento impuesto por el estado de alarma. Primero fue a partir de los 12 años, luego 14, más tarde 14 pero sólo para ir al supermercado, a los bancos o a la farmacia y, finalmente, para «poder dar paseos». Todo ello en once horas. Todo ello por un mismo Gobierno.

«El Gobierno hablará con varias voces pero con una misma palabra», prometió Pedro Sánchez cuando sus ministros tomaron posesión del cargo hace ahora cien días. En la primera parte de la frase acertó, en la segunda... Los manuales de política advierten de que liderar un Gobierno de coalición no es misión sencilla y la realidad, cruda como nunca, durísima, evidencia que la teoría y la práctica van de la mano.

El carrusel de idas y venidas en el mensaje del Gobierno comenzó a primera de la mañana. Minutos antes de las diez, la ministra de Educación y exportavoz del Gobierno, Isabel Celaá, anunció en TVE que los niños, hasta 12 años, podrían salir con sus padres y de forma limitada a partir del 27 de abril, lunes. Así lo avanzó el propio Sánchez el sábado por la noche sin entrar en más detalles. Todo quedaba en manos de los técnicos. Pues bien, lo que para el PSOE eran 12 años a las diez de la mañana derivó más tarde en 14 años para Unidas Podemos.

Sólo para hacer supermercados

Lo contó en la Sexta el ministro de Consumo, Alberto Garzón. Eran las dos de la tarde. Lo hizo minutos antes de que la ministra Portavoz, María Jesús Montero, compareciese tras el Consejo de Ministros para anunciar precisamente esto, que finalmente serían 14 años. No hubo primicia, su compañero de Gobierno ya se había adelantado. Eso sí, Montero remarcó que sólo podrían hacerlo para acompañar a uno de los primogénitos para ir al supermercado, al banco o la farmacia, nunca para pasear.

Y claro, fue decir esto y el aluvión de críticas sociales y políticas cobró tal fuerza que Unidas Podemos decidió maniobrar para obligar al PSOE a rectificar. Volvía a repetirse la historia que se vivió, por ejemplo, la semana pasada con el ingreso mínimo vital exigido por Pablo Iglesias para mayo. Dicho y hecho. A las 20.42 horas, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, anunció que el fin de semana emitirá una orden que permitirá que «los niños puedan dar paseos». «Este es un Gobierno que escucha», recalcó.

Mientras tanto, en Twitter, Iglesias vendía su relato a través de varios mensajes. «Acabo de hablar con el ministro Illa tras la reunión de los equipos de la Vicepresidencia Segunda (la suya), Sanidad y el equipo de desescalada que coordina la Vicepresidencia cuarta (Teresa Ribera). Nos congratulamos de que se adopten las recomendaciones que ha venido planteando nuestra Dirección General de Derechos de la Infancia y de la Adolescencia (depende de él). Desde el próximo domingo los niños y las niñas podrán realizar paseos acompañados de personas adultas. Niñas y niños deben poder salir a la calle para respirar al aire libre, con paseos cortos y controlados. Es de sentido común. Con esta medida se consigue un equilibrio entre la protección frente a la pandemia, y el bienestar emocional de los niños y las niñas».