Diez consejos para prevenir las muertes por ahogamiento
La temporada de playa y piscina ha arrancado, una época esperada por muchos, pero en la que no hay que bajar la guardia ya que el ahogamiento supone la segunda causa de muerte accidental infantil
Los datos no dejan duda. El primer Informe Nacional de Ahogamientos de Menores ha puesto sobre la mesa que el ahogamiento supone la segunda causa de muerte accidental infantil. Unos 30 niños pierden la vida al año en nuestro país por este motivo.
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Desde la asociación 'Ojo, peque a agua' aseguran que «prácticamente el 100% de los ahogamientos infantiles podrían ser evitados». Por ello, estar informado y no perder de vista a los menores cuando hay agua de por medio es básico.
Este tipo de accidentes ocurren en todas partes, pero datos de la Asociación Española de Pediatría (AEP) publicados en 2019 mostraban que «8 de cada 10 ahogamientos infantiles en España se producen en piscinas privadas», es decir, en piscinas particulares o de viviendas unifamiliares.
Son varios los consejos que se pueden dar para prevenir ahogamientos pero el más importante, sin ninguna duda es la vigilancia. Cuando hay agua de por medio no se le puede quitar los ojos de encima a los niños, aunque tengan manguitos, o con una burbuja.
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De hecho, según el informe Nacional de Ahogamientos de Menores, cuatro de cada cinco menores fallecidos por ahogamiento no estaban vigilados. «La mayoría de los fallecidos son niños de entre dos y cuatro años y en un entorno no vigilado, principalmente piscinas particulares», detalla el documento.
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Según datos de la asociación 'Ojo, peque al agua', en lo que va de año 16 niños han perdido la vida por ahogamiento. Estos son algunos consejos para tratar de prevenir que esta cifra continúe aumentando.
Consejos para prevenir accidentes
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¿Cómo actuar en caso de ahogamiento?
La rapidez en estos casos es clave para tratar de salvar la vida al pequeño. La AEP da algunas pautas que se deben poner en práctica si ocurre este tipo de accidente:
- Sacar al menor del agua lo más rápido posible.
- En caso de que el pequeño respire y esté consciente, colocarlo de lado para favorecer que expulse el agua líquido por medio del vómito o la tos. Con este paso también estaremos evitando que se obstruyan las vías respiratorias.
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- Si el pequeño no respira hay que aplicar, lo más rápido posible las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP)
- Llamar al 112, el teléfono de emergencias. Si hay más de un adulto o algún otro menor que pueda llamar puede hacerlo mientras se practica la RCP, sino, hay que avisar a emergencias tras practicar la RCP. Después se continuará realizando la maniobra hasta la llegada de emergencias.
- Quitarle la ropa mojada y taparlo con una toalla o manta para evitar que le coja el frío.
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