¿Es bueno empezar a practicar deporte a partir de los cuarenta?

Decidirse a incluir el ejercicio siempre va a ser una buena decisión. Empezar a realizar una actividad física de manera habitual es algo que va a repercutir positivamente en la salud, independientemente de la edad que se tenga.

Lo que es importante es tener en cuenta cuántos años se han vivido de sedentarismo a la hora de incluir la actividad en la rutina porque es necesario tomar una serie de precauciones y empezar a realizarla con moderación.

A partir de los 40-45 años se ha comprobado que la actividad física diaria mejora la salud y por consiguiente, la calidad de vida de las personas. Se tienen datos de que en estas edades la actividad física habitual repercute en mejorar la memoria y reducir la posibilidad de depresión, estrés o ansiedad. Obviamente favorece el desarrollo de la masa muscular, la elasticidad, el sistema inmunológico y la eficacia cardio-respiratoria.

A partir de esta edad, los 40-45 y si se ha mantenido hasta ese momento un estilo de vida mayoritariamente sedentario, el deporte o la actividad física que se quiera empezar a practicar habrá que hacerlo con un poco de moderación.

Los especialistas hablan de que la práctica exhaustiva puede traducirse en un incremento del riesgo cardiovascular por el aumento de la presión arterial y de la frecuencia cardiaca que se produce durante la realización del ejercicio o la práctica del deporte elegido.

A esta edad y tras un pasado sedentario es muy recomendable empezar con deportes como el senderismo o la marcha nórdica, la bicicleta estática o la natación.

No es bueno plantearse empezar con un deporte de una manera competitiva en ningún caso pero sí es recomendable empezar a ejercitarse con un grupo homogéneo tanto en edad como en capacidad física porque esto aporta seguridad y apoyo para superar los pequeños problemas que puedan surgir durante los primeros días de práctica deportiva.

En conclusión: los ejercicios de tipo aeróbico de intensidad de baja a moderada son los más aconsejables para iniciar una actividad física a partir de los cuarenta si se ha mantenido un estilo de vida sedentario hasta el momento.

No se debe forzar la máquina ni alcanzar el nivel de fatiga cuando se está empezando, es imprescindible calentar y estirar antes de empezar con la práctica deportiva o la actividad física elegida.

1Es muy recomendable empezar con un ejercicio ligero de corta duración y con descansos alternos.

2No es conveniente practicar deporte a última hora de la tarde porque podría interferir con el descanso nocturno.

3No es recomendable empezar a practicar deporte en unas condiciones extremas de frío o de calor, independientemente de que se haga en sitios cerrados o al aire libre.

4Es imprescindible relajar la musculatura antes de empezar con el ejercicio para prevenir el agotamiento o el cansancio excesivo que provoca la tensión.

5Igual que hay que calentar antes de la practica del deporte o el ejercicio elegido, también hay que estirar para estirar cuando se haya finalizado.

6Siempre se detendrá la actividad que se esté realizando cuando haya un síntoma fuera de lo normal (mareos, palpitaciones,...)

7Si se puede es muy recomendable contar con la supervisión, al menos inicial,

8Los ejercicios de fuerza también son muy interesantes a partir de los 40-45 años para mejorar la calidad de vida y se deben tener en cuenta a la hora de integrar la actividad física en la rutina habitual.

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