«En el Carmín hemos sabido adaptar las tradiciones sin que perdieran su esencia»

Fue un pregón dinámico, coral, teatralizado y muy centrado en la tradición. No en vano, este año se encargaba de dar lectura al pregón de las fiestas de El Carmín el Grupo Folclórico y de Investigación El Ventolín. Y lo hizo con mucho arte, conquistando con sus palabras y haciendo una clara defensa de las tradiciones.

En un pregón en asturiano y castellano, remarcaron que una de las claves del éxito de El Carmín, que atesora 330 años de antigüedad, es que a lo largo de todos estos siglos los polesos han sido capaces de adaptar las tradiciones sin que perdieran su esencia.

Y ellos mismos se ofrecieron a echar una mano en ese proceso continuo entre conservar las tradiciones e incorporar otras cosas nuevas o diferentes. Así, se pusieron a disposición de la Asociación de Amigos del Roble para intentar recuperar la danza alrededor del carbayu en la noche de San Pedro mientras se cantan les sampedraes. Y deslizaron la posibilidad de un cambio, que en realidad es un retorno al pasado, al plantear que en la Danza Prima del martes se vuelva a la estructura tradicional de la danza de El Carmen, en círculos concéntricos y no en filas enfrentadas. Asimismo, contaron que hasta hace poco más de cien años la Danza Prima cerraba los festejos, como ahora, pero era la Danza de los Romeros o de los Danzantes con la que se acababa la procesión.

Esta danza, contaron, estuvo perdida, pero gracias al trabajo de Luis Argüelles, publicado en 1984, pudo realizarse el año pasado una reconstrucción, junto con Fernando de la Puente, El Ventolín y el Grupo Principado de Lugones. Aún así, está pendiente todavía de recuperar esta danza completamente, «reincorporándola a su lugar original como remate de la procesión de El Carmen».

«Llanzamos estos guantes y quedamos a la espera de ver si dalgún se recueye», dijeron.

No faltaron, por otra parte, los agradecimientos. Al Ayuntamiento de Siero –cuyo teniente de alcalde, Javier Rodríguez, junto con la edil de Festejos, Ana Nosti, y otros concejales acudieron al pregón– por elegirlos para dar el pregón, a todos aquellos, personas y empresas, que colaboran con El Ventolín. Porque una iniciativa como la suya, recordaron, no sería posible sin el apoyo económico, pero tampoco sin el humano.

También se acordaron dl Grupo de Baille Traidicional de Fitoria, con el que confían en seguir caminando muchos años más. Y, cómo no, «a toles ventolines y tolos ventolinos». Y de entre todos quienes de alguna manera han formado parte de su historia sí quisieron destacar a dos de sus presidentes, Fidel Pevida y Joaquín Ruiz, que llegaron tras Josefina Feijóo. Y a Óscar y Pili, «dos personas perespeciales».

«Nesti grupu, nun solo se baila. Fáense munches más coses y ellos dos siempres tuvieron ehí, dende'l principio, p puxar toles iniciatives y echar un gavitu pa que se llevarab a cabu».

Y al público congregado ante la plaza del Ayuntamiento, un mensaje: «De corazón, muches gracies. Nun vamos a escaecer esto enxamás».

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