La planta de ocio del centro comercial del valle del Nalón cierra al completo
Los negocios comienzan a bajar la persiana mientras que los siguen están pendientes de su traslado a la zona de cajas, que acogerá la oferta de ocio
No hay vuelta atrás. El centro comercial valle del Nalón cerrará definitivamente su planta de ocio a principios de agosto. La intención de los gestores es que en el mes de agosto comience el nuevo sistema, que implica que parte de los negocios que hasta ahora estaban ubicados en la zona de ocio continúen su actividad en los locales situados en la línea de cajas del supermercado de alimentación, tal y como adelanto EL COMERCIO.
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El cierre de «prósperos» negocios va a suponer el fin de la actividad para muchos de ellos, que no han podido llegar a un acuerdo con la empresa gestora del centro comercial, como es el caso de una zapatería, una peluquería, un gimnasio, un comercio de ropa y una tienda de deportes, entre otros. Mientras que de forma escalonada ya han ido bajando la persiana semanas atrás otras empresas tras recibir el aviso de que no se contaba con ellas para la zona de cajas. Se calcula que podrían perderse en torno a medio centenar de puestos de trabajo.
Los empresarios que se ven abocados al cierre por decisión de los gestores de este eje comercial entreguín continúan sin comprender una decisión que «nos obliga a cerrar unos negocios que estaban manteniendo empleo estable y que daban beneficios». Aseguran que a la gran mayoría de los negocios «nos obligan a cerrar, incluso comunicándoles nuestra decisión de querer continuar en el centro».
Lucharon durante meses contra esta decisión, que siguen considerando «injusta», logrando aplazarla un mes, de junio a julio, e incluso reclamaron al Ayuntamiento de San Martín del Rey Aurelio, el pasado mes de abril, que mediase para intentar revocar dicha decisión. Los socialistas, al frente del Ayuntamiento, han hablado con la gerencia, pero la información no ha llegado al resto de formaciones políticas, que afean esta postura «oscurantista». Lo que es seguro es que no hubo avances y el cierre en una semana parece no tener vuelta atrás.
En la otra parte de la balanza están los empresarios más afortunados, como un negocio de restauración, una tienda de ropa para niños y adolescentes y una parafarmacia. Estos ya tienen ubicación en la línea de cajas del supermercado de alimentación. Se unen así a una escasa oferta, tras varios cierres en el último año, que hasta el momento hacía en este espacio.
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Queda en el aire cómo se gestionará el uso del aparcamiento subterráneo, ya que se valora clausurar al menos la segunda planta y los baños del aparcamiento.
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