La ola de calor se despide de Asturias con fuertes granizadas

La ola de calor que llegó con el inicio de agosto se acaba. Quedan atrás cuatro días en los que los termómetros de Asturias han superado con creces los 35 grados, temperaturas que este lunes han puesto en aviso amarillo a toda la franja sur de la región. La entrada de un frente atlántico hará que el mercurio descienda de forma notable a partir de este martes (hasta quince grados menos se esperan mañana en concejos del interior como Laviana) y que las lluvias vuelvan al verano del Principado.

Y lo harán desde esta misma noche. De hecho, en concejos del Oriente ya se están notando los primeros cambios meteorológicos. Y de qué manera. En Infiesto, en torno a las 20 horas de este lunes ha caído una intensa granizada que ha sorprendido a vecinos y turistas. Además, el granizo era de un tamaño significativo, lo que ha obligado a muchos a buscar refugio. En Llanes, por su parte, han empezado a escuchar el estallido de los truenos.

Así, no extraña la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) para mañana: cielos cubiertos, sin descartar brumas matinales en zonas altas ni precipitaciones débiles por la tarde. Es más, el portavoz nacional del organismo, Rubén del Campo, ha señalado que agosto recuperará el tiempo registrado durante el mes de julio, que estuvo marcado por temperaturas más frescas de lo normal y tormentas significativas. Y es que el aire fresco procedente del Atlántico que entrará por el norte y noroeste junto con una vaguada provocará de nuevo tormentas en el norte y noreste peninsular.