Los ganaderos asturianos toman Oviedo contra los excesos burocráticos y la protección del lobo
El consejero de Medio Rural se reunirá hoy con los sindicatos URA y USAGA para analizar sus reclamaciones
El campo asturiano muerde, de pura desesperación. Se irrita con facilidad, porque son muchos años de lento declive y disminución de sus rentas. De ver cómo las explotaciones se van quedando sin relevo para sus titulares cuando estos se jubilan, porque nadie quiere seguir sufriendo por una remuneración, económica y social, cada vez más exigua.
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Ayer fue el turno de los sindicatos URA y USAGA, los dos que no están en el Consejo Agrario, para manifestarse en Oviedo por su situación. Las reivindicaciones de estas dos centrales van en su práctica totalidad dirigidas al Gobierno del Principado. En resumen, que el Gobierno regional revise las normas que afectan y burocratizan el trabajo de los ganaderos, como la Ley de Calidad Ambiental y la normativa regional de bienestar animal. Que revisen los baremos de daños por la acción de la fauna salvaje (aquí se incluye la exigencia, no expresada en su comunicado, de hacer lo posible por que el Gobierno central elimine la protección del lobo) y que el Principado abone las ayudas de la PAC aunque los ganaderos estén pendientes de inspecciones, entre otras reclamaciones.
El hecho de que las reivindicaciones se dirijan al Gobierno regional es el motivo por el que Asaja y COAG, centradas ahora mismo en las movilizaciones frente a la política agraria comunitaria, no apoyaron ayer la manifestación. De hecho, una de las reivindicaciones apunta a uno de los principales motivos de que los cinco sindicatos agrarios no tengan unidad de acción en esta tanda de movilizaciones. URA y USAGA reclaman que, tras más de dos décadas sin ellas, se convoquen elecciones a la Cámara Agraria del Principado.
UCA, por su parte, estuvo presente al principio, pero no intervino cuando la manifestación estuvo a punto de tornar en algarada. Y fue así por dos razones adicionales al malestar intrínseco del campo asturiano. Una, que la Delegación del Gobierno recortó el miércoles el permiso solicitado, de siete horas a cuatro, para la manifestación. Otra, que las fuerzas de seguridad retrasaron notablemente el inicio de la manifestación, al refrenar en Las Regueras a varios tractores que, procedentes del occidente asturiano, traían a la vista una carga notable de neumáticos y plásticos para quemarlos en las calles de la capital. Esto retrasó la llegada a Oviedo más de una hora.
Así pues, llegadas las dos columnas de tractores a las proximidades del palacio de Presidencia, los procedentes del oriente y centro de la región se encontraron con una barricada de furgones antidisturbios que les impedían seguir, y se lanzaron, a la carrera, por el paseo de los Álamos hacia Presidencia. Allí, en lugar de proteger tan sólo la entrada del palacio, la Policía Nacional tenía órdenes de no dejar pasar a los manifestantes, y ante el empuje de estos, los agentes cumplieron con su deber y, por dos veces, tuvieron que emplear la fuerza para frenarles.
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Los ánimos, lejos de calmarse, se encendieron aún más, al punto de que primero uno y luego dos tractores hicieron amago de arrollar a los agentes y se quedaron, motores encendidos y acelerones de por medio, a apenas un par de metros de la línea policial.
El consejero, en Grandas
Mientras tanto, los secretarios generales de URA, Borja Fernández, y USAGA, Fernando Marrón, negociaban telefónicamente con el Principado. Al convocar la manifestación ambos sindicatos habían pedido que el consejero de Medio Rural les recibiese al término de la misma. Pero la agenda del consejero -que normalmente se determina con bastantes días de antelación- tenía previsto ayer por la mañana una reunión en Grandas de Salime con el alcalde, Eustaqui Revilla. Y por la tarde, en Illano, tenía la firma de las concesiones de las parcelas del monte Carbayal a ocho ganaderos.
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Algunos de los manifestantes insistían en conseguir que les recibiese «Barbón o el consejero, como poco», mientras que la directora general de Ganadería, Rocío Huerta, accedía a reunirse con sus líderes, que a las dos de la tarde desconvocaron la manifestación sin lograr con ello que los ganaderos dejasen la zona. Durante toda la tarde el centro de Oviedo siguió afectado, con la zona de Uría entre La Escandalera y la calle Independencia tomada por tractores -y algún remolque con carga de cucho que recordaba a la capital que hay una Asturias en riesgo de muerte socioeconómica-, mientras el consejero hizo saber a las dos asociaciones que se reunirá hoy con ellos para analizar sus reivindicaciones, en un encuentro en el que participarán también Rocío Huerta y el director general de Planificación Agraria, Marcos da Rocha.
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