Concentración de personal facultativo a las puertas del Hospital San Agustín de Avilés. Marieta / video: damián arienza

«Quieren contratar más de diez mil médicos en España sin especialidad para ejercer de especialistas»

Los médicos asturianos secundan la huelga nacional y se concentran en los hospitales asturianos y en algunos centro de salud contra el «decretazo que supone un ataque frontal contra el sistema sanitario»

Lucía R. Lorenzo

Martes, 27 de octubre 2020, 10:17

Este martes comienza la huelga médica nacional contra el «decretazo» Real Decreto Ley 29/2020 «suspendiendo consultas y quirófanos en todos los hospitales». Así lo han indicado fuentes sanitarias y sindicales que sostienen que la huelga ha empezado con «normalidad y sin incidentes». Este mediodía los médicos se han concentrado en hospitales y en algunos centros de salud. La huelga se realizará el último martes de cada mes y es de carácter indefinido.

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Una de las concentraciones ha tenido lugar en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), a la que asistieron alrededor de cuarenta facultativos. El secretario general del Sindicato Médico Profesional de Asturias (SIMPA), Antonio Matador, ha indicado que «los pacientes tienen que entender que quieren contratar más de diez mil médicos en España sin especialidad pero para ejercer de especialistas y, entre estos, hay más de un 40% extracomunitarios que dicen tener un título pero que no lo tienen homologado ni sabemos cuál es el grado de formación. Esos son los que van a atender a los pacientes en los próximos años».

En relación con el seguimiento de la huelga en Asturias está siendo, indica, «irregular, pero hay servicios donde hay un seguimiento del 70% de huelga, por ejemplo un Servicio de anestesia que solo al 30% se les permite ir a la huelga. Hay unos servicios mínimos muy altos, en los servicios relacionados con la covid, los servicios esenciales, estamos cercanos al 100% y esto limita nuestra capacidad. Pero estos servicios mínimos hay que tener en cuenta que son en huelga, están siendo más alto de lo que esperábamos y todo ello desde la responsabilidad conociendo la situación que estamos padeciendo». Por su parte, el presidente del SIMPA, Javier Alberdi, ha explicado que «el SAMU quiere hacer huelga y también Urgencias pero los mínimos son el 100% y no pueden hacerla. Hay personal afectado que no puede por ser mínimo». Además, en Atención Primaria, Matador ha detallado, «en el Área Sanitaria IV de Oviedo hay muchos médicos en situación de IT cercano al 12%, que es un número importante de personal de baja».

En relación con el Servicio de Salud del Principado (Sespa), Matador ha expresado que dijeron «que de momento no se iba a aplicar, pero con este decreto aquí la gerente del Sespa ha dicho el otro día que esto era una herramienta que estaba ahí. Ahora mismo no la van a aplicar, pero mañana podemos cambiar de opinión y puede ocurrir también que tengamos otra gerencia del Sespa u otro consejero, es decir, mientras el Real Decreto esté ahí, esto es una espada de Damocles».

Sobre el nuevo modelo asistencial implantado en los centros sanitarios con motivo de la pandemia y las críticas recibidas, Matador sostiene que «los médicos de los centros de salud siguen trabajando hasta las cinco o las seis de la tarde. Estamos en una atención telefónica que no queremos, yo mismo como paciente llevo dos o tres días intentando hablar con un centro de salud para una cuestión mía personal y es verdad que no te cogen el teléfono». Sobre este asunto, indica que debería «como mínimo, aumentar contratación de administrativos, aumentar posibilidades de atención telefónica, es decir, es otra cuestión que no depende de los médicos. Pero ahí está y no se hizo»

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«Minimizar daños»

Fuentes sanitarias y sindicales indican que «el seguimiento de esta huelga está siendo bueno, pero se intenta minimizar los daños a los pacientes». El principal problema, explican, «es que los mínimos tienen que ocuparse de toda la tarea urgente y preferente. Algunos pacientes citados regularmente no van a poder ser atendidos a pesar de estar citados».

Los mínimos acordados con el Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) son que acudan a trabajar el 50% de los médicos de Atención Primaria, el 60% de especializada y el 100% de servicios de Urgencias y guardias.

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«El decretazo supone un ataque frontal al sistema sanitario donde deja muy mal parada a la Atención Primaria y a la Medicina Familiar y comunitaria», expresa el presidente del Sindicato Médico Profesional de Asturias (SIMPA), Javier Alberdi. En este sentido explica que «el hecho de abrir fronteras a médicos sin cualificación acreditada, evidentemente, es una asalto a la calidad del sistema en el cual los principales perjudicados van a ser los pacientes. No se garantiza la formación de los médicos que se puedan contratar lo que supone la pérdida de la calidad asistencial de Atención Primaria que ya estaba mermada». El objetivo de esta huelga, indica, es «acabar con este decreto que supone un ataque al sistema actual, al sistema MIR, a la formación y un tiro de gracia a la Atención Primaria. Las movilizaciones seguirán mientras persista».

«No hemos dejado de trabajar»

Sobre la críticas por el nuevo modelo asistencial implantado con motivo de la covid, Alberdi recuerda que «los profesionales no hemos dejado de trabajar, los centros de salud siempre han estado abiertos. Con el cambio del modelo asistencial se puso un filtraje previo telefónico, pero el paciente que necesita acudir al centro de salud acude». En relación con la sobrecarga asistencial, advierte de que «la presión asistencial en Primaria, Urgencias y Especializada es tremenda, los profesionales están trabajando a destajo. Lo que pasa que los pacientes al no verlo creen que los médicos están de vacaciones cuando en realidad estamos agotados de trabajar».

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Manifiesto del Sindicato Médico Profesional de Asturias (SIMPA) por las concentraciones durante la Huelga 27-O

«La Sanidad española, envidia de Europa durante décadas y uno de los pilares del Estado de Bienestar, fue lastrada y degradada duramente por una década de recortes, que mermaron notablemente su capital humano, sobre todo facultativo. Cuando parecíamos salir del túnel , la pandemia de la covid-19 nos ha puesto de relieve las carencias aún no resueltas, entre ellas la falta de personal facultativo.

En este momento, el Gobierno de la nación, en vez de apostar por fortalecer el sistema mediante la potenciación del excelente sistema de formación especializada de que se dispone, el sistema MIR, la fidelización de sus profesionales mediante contrataciones dignas y la facilitación de inversiones en recursos adecuados para atender dignamente a los pacientes, ha preferido optar por la completa aniquilación del sistema, promulgando el Real Decreto Ley 29/2020 que nos retrotrae la Sanidad cuatro décadas atrás.

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El RDL 29/2020 que se presenta como solución a la supuesta carencia de profesionales médicos pone en grave riesgo la salud de todos los pacientes y menoscaba sus derechos, al no asegurar al paciente que serán tratados por un médico con la Formación Sanitaria Especializada como marcan las leyes que regulan el ejercicio profesional de la medicina en toda Europa. Según este RDL los pacientes pueden ser tratados por médicos sin ninguna especialidad, por médicos de otras especialidades y hasta por otras categorías profesionales que asuman competencias propias del médico, suponiendo todo esto una grave degradación de todo lo que supone la Sanidad Pública Española, eliminando de facto la Atención Primaria de Salud ya de por sí siempre infradotada, y eliminando las garantías asistenciales de calidad y seguridad mínimas que merecen todo paciente o usuario.

Es por todo que el SIMPA, como sindicato confederado en la CESM, se ha visto obligado por respeto a los pacientes y al futuro de los profesionales y del propio sistema como lo conocemos, a convocar esta huelga en el peor de los escenarios imaginables. Y la hemos convocado porque pedimos fundamentalmente dos cosas:

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1- La retirada inmediata del RDL 29/2020 por poner en grave riesgo la seguridad de los pacientes. Si se buscan medidas temporales extraordinarias, esta no es la vía ya que contiene una reforma negativa y profunda del sistema.

2- Si se quiere modificar el sistema, queremos un Pacto por la Sanidad de Todos y para Todos, que asegure la solvencia financiera, la calidad asistencial y busque soluciones a la saturación crónica del sistema, desde el consenso y el diálogo de todos: responsables políticos, agentes sociales, pacientes y profesionales, equiparando nuestra Sanidad a la europea. Qué menos nos merecemos todos.

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Todos merecemos la mejor Sanidad. En los pacientes, recibirla. En los profesionales, en poder prestarla. ¡Derogación del RDL 29/2020 ya! ¡Salvemos la Sanidad!«

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