Hallan un proyectil de mortero durante unas obras en Margolles

Las obras en unos chalés de Margolles, en Cangas de Onís, han terminado por desenterrar el pasado. Los operarios que trabajan en la propiedad de Javier Núñez, junto a la N-634, se encontraban removiendo tierras con la pala a última hora del lunes cuando uno de ellos halló un objeto sospechoso. «Dijo '¿qué será eso?', y ya nos dimos cuenta de que era un proyectil», cuenta Núñez. En concreto se trataba de un proyectil de mortero, tal y como ayer les confirmaban efectivos de la Guardia Civil. Tras dar aviso a los agentes de Cangas de Onís, el pasado mediodía se trasladaban a la zona los especialistas del Gedex, que se llevaron el artefacto para su detonación en un enclave seguro. Por precaución, Núñez y sus compañeros habían depositado el dispositivo en la terraza, evitando así todo contacto que pudiera activarlo. Todavía con cierto susto en el cuerpo, el propietario de los terrenos se preguntaba ayer qué hubiera pasado de «pincharlo con la pala».

El proyectil de mortero, que a la vista no era más que «hierro 'furruñosu'», se encontraba entre un montón de tierra que hace doce años habían trasladado desde otra casa de Cuencu, también en Cangas de Onís. «Habíamos derribado esa casa y los escombros los trajimos aquí», explica el dueño, también empresario del sector de la construcción, quien reconoce que en todos sus años de actividad no había visto nada parecido.

Las obras y movimientos de tierra son los momentos más propicios para que aparezcan este tipo de artefactos, normalmente pertenecientes a la Guerra Civil. Los hallazgos son frecuentes en toda España y también en Asturias. De hecho, los agentes le indicaron a Núñez que acababan de recoger más explosivos en la zona de San Isidro.

En el Oriente, uno de los últimos casos se registró el pasado año, cuando apareció una granada de mano en Onís. La zona de Cangas de Onís es además una de las más 'fértiles' en ese tipo de hallazgos bélicos. En el concejo se vivieron algunos de los bombardeos más intensos de la contienda, hasta el punto que llegó a ser considerado como el 'Guernica asturiano'.