Fallece a los 99 años Pepa Las Murias, «la abuela de Asturias»

La voz de María Josefa Fernández, más conocida como Pepa Las Murias, «venía del pasado y parecía del futuro». Referente de los investigadores que recogen la tradición oral asturiana, falleció el lunes a los 99 años en Oviedo, a punto de convertirse en centenaria. La iglesia parroquial de San Pedro de Coalla (Cuaya), en Grado, será testigo del último adiós de quien era considerada «la abuela de Asturias».

Así se refiere a ella el cantante y estudioso de la cultura asturiana Xosé Antón Ambás. Gracias a él, Pepa dio el salto a la pantalla en 2007 en el programa 'Camín de Cantares'. A ella estuvo dedicado su primer capítulo y marcó «un antes y un después». «El pueblo asturiano la identificó con esa güela que nos cantaba a todos», recuerda Ambás sobre una de las personas que más marcó su trabajo de investigación.

«Es una pérdida inmensa en lo personal pero también en lo referencial, guardaba gran cantidad de repertorio popular y le daba mucha vida con su voz cada vez que cantaba los aguinaldos», rememora Ramón Lluis Bande, poeta, novelista, dramaturgo, músico y director de cine. Él, como muchos, conoció a Pepa a través de Ambás y pronto quedó prendado de la «fuerza» de su voz, pero también de su mente bastante abierta y moderna.

«Falaba de manera natural en un asturiano occidental de Grado guapísimo, cantaba, recitaba… tenía una capacidad de transmitir con un buen rollo que cautivaba y hubo un pico de audiencia, la gente me sigue preguntando por ella», cuenta el investigador.

La conocía bien. «Era una mujer de postal con unos ojos azules de película», aseguraba con cariño. Ya en los 90 la de Las Murias se había convertido en una importante informante de la cultura del concejo y era a su vez protagonista de la portada de uno de los discos del trío musical Tuenda, en el participaba Ambás y del que parte de los aguinaldos tenían su origen en María Josefa Fernández. Su voz también quedó recogida en el Archivu de Tradición Oral d'Ambás y los Atlas Sonoros de la Llingua Asturiana, donde perdurarán para las nuevas generaciones sus cuentos y leyendas tradicionales.

Y es que Pepa era «referente, maestra e imagen», todo a la vez. No solo como historia viva de una Asturias ya inexistente, sino como esa mujer que desde Ca Trillivalle de Las Murias y con su pañuelo a la cabeza se metió en el imaginario de toda una región y se convirtió en «la abuela de Asturias».

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