El frío y las nevadas continuarán

El temporal se dejó notar ayer en Asturias, con varios puertos de montaña con cadenas, temperaturas bajo cero y olas que superaron los seis metros de altura en el Cantábrico. El inicio de la primavera se está comportando como si fuera el más crudo invierno y las nevadas llegaron a obligar el uso de cadenas a primeras horas de ayer en seis puertos: San Isidro (Aller), Tarna (Caso), Ventana (Teverga), La Cobertoria (Quirós), San Lorenzo (Somiedo) y San Ignacio (Ponga). También en la carretera cabraliega AS-264, desde Poncebos hasta el límite con Cantabria. Estaban cerradas las carreteras a los Lagos y al puerto de La Cubilla.

La mar también se vio afectada, con vientos que alcanzaron los 82 kilómetros por hora en el litoral y que levantaron olas de hasta 6,25 metros, según registró la boya del Puerto de Gijón. La flota de bajura quedó amarrada en toda Asturias. Todo ello se completó con una notable bajada de las temperaturas, llegando a los 4,9 grados bajo cero en Valgrande-Pajares. Por contra, las lluvias no fueron especialmente cuantiosas, pues las cantidades máximas recogidas rondaron los 15 litros por metro cuadrado, en Amieva y Piloña. Para hoy no hay avisos activos en el Principado, aunque se esperan nevadas débiles a partir de los 400 metros de altitud al principio del día. Las precipitaciones tenderán a remitir al final de la tarde y las temperaturas máximas irán en aumento. Se esperan vientos fuertes en la costa.

La nieve de ayer dejó imágenes espectaculares en el oriente de la región. Cayeron copos en Arenas de Cabrales, Carreña, Asiegu y Ortiguero, si bien las precipitaciones fueron mucho mas copiosas en núcleos más altos, como Sotres y Tielve. En este último, la quesera Chelo Bada confiaba en que la nevada no sea muy copiosa, pues entonces «habrá que comprar comida para la reciella, ya que no tendrá pasto». Un contratiempo que podría empeorar más la difícil situación que atraviesa el sector con la caída de ventas por la crisis del coronavirus.

También en otros concejos de los Picos de Europa, como Peñamellera Alta, Amieva, Onís y Cangas de Onís, se dejó notar el cambio en el tiempo. «Nevó en casi todos los pueblos y en los más bajos, como Mier y Trescares, cayó una buena granizada», relataba el alcalde de Peñamellera Alta, José Antonio Roque.