La lluvia derrota a los sanjuaninos de Avilés

La lluvia ha impuesto esta tarde su cruel ley en Avilés y ha provocado que la procesión del Silencio no cumpliese todo el recorrido, provocando que la Cofradía de San Juan Evangelista regresase a San Nicolás de Bari apenas un cuarto hora después de iniciar su marcha.

Con las calles del centro histórico a rebosar de gente, la procesión del Silencio comenzó su recorrido con un cuarto de hora de demora sobre la procesión. El levantamiento del paso de la Tercera Palabra fue seguido por numerosas personas en la plaza de Álvarez Acebal. En esos primeros momentos, ya comenzaba a gotear.

Después de todo un Jueves Santo sin rastro de lluvia, salvo cuatro gotas a lo largo de la tarde, todo apuntaba a que el clima respetaría a la procesión del Silencio. Pero no fue así. Las previstas lluvias hicieron acto de presencia cada vez con más intensidad. Con la procesión ya en la calle de La Fruta, los sanjuaninos tomaron la decisión más dolorosa e inevitable: acortar el recorrido por la calle de San Bernardo y regresar a San Nicolás. Con la mayoría de los cofrades que llevaban el paso de la Tercera Palabra descalzos, continuar era un gran riesgo, además del daño en las esculturas. La procesión del Silencio vivía una versión acortada por las inclemencias del tiempo. A ver si mañana respeta las procesiones anunciadas.

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