Enagás plantea construir infraestructuras para obtener biometano en Asturias

«Estamos promocionando que en Asturias se desarrollen una serie de infraestructuras para el aprovechamiento del biometano», apuntó. Una tecnología que conllevaría grandes ventajas ambientales, al impulsar la economía circular, ya que se obtiene del biogás generado con residuos agrícolas y ganaderos. «Estamos impulsando en Asturias este tipo de proyectos porque nos parecen muy significativos. De hecho, nos gustaría poner en valor alguna de las iniciativas relacionadas con el bio GNL», añadió. Este biometano en forma líquida que se puede usar como carburante sostenible podría servir al sector marítimo «para reforzar la competitividad económica y ambiental de algunas líneas que esperamos que recalen en El Musel», apuntó Rodríguez.

La planta gasista del puerto gijonés, que está en la recta final de la tramitación administrativa para comenzar a operar, será, tras su adaptación, una central «híbrida» que no tendrá la función de almacenamiento estándar, sino que la idea es buscar sinergias entre diferentes procesos y vectores energéticos. Asimismo, anunció la firma de un convenio de colaboración con la Universidad de Oviedo para «potenciar ese conocimiento para que estas inversiones no sean solo pan para hoy y poco alimento para mañana».

Precisamente, El Musel también quiere desempeñar un papel esencial en la descarbonización. La directora comercial y de Proyectos Europeos del Puerto de Gijón, Ainhoa Puebla, puso de manifiesto que estas instalaciones son «importantes plataformas logísticas y es donde cada vez se van a dar más grandes consumos energéticos», de modo que son lugares «favorables para la instalación de renovables». El objetivo es «convertir El Musel en un puerto verde y reducir la factura energética», para lo que ya están trabajando en proyectos de combustibles alternativos y generación renovable como apoyo a la parte privada.

La mesa redonda, en la que también participaron representantes de Construcciones García Rama, Erbi y Capital Energy, estuvo moderada por el director general del Club de la Energía, el asturiano Arcadio Gutiérrez, quien señaló que la tradición industrial de la región es «una de sus grandes fortalezas» a la hora de aprovechar las oportunidades de la descarbonización. En este foro, el director territorial de Capital Energy, Ricardo Fernández, explicó que la compañía tiene en cartera casi 20 gigavatios de potencia renovable, 8,6 de ellos ya concedidos. En Asturias, está trabajando «en 31 proyectos, que suman 1,2 GW y tienen un horizonte de construcción hasta 2023». La inversión asociada de estos parques eólicos supera los 770 millones de euros.

En cuanto a los proyectos de Erbi (empresa del Grupo Lamelas Viloria), su responsable de Explotación, Fernando Silván, desgranó los detalles de las dos centrales depuradoras reversibles con capacidad para almacenar energía que la compañía plantea ejecutar en Degaña y Tineo. «La principal peculiaridad de nuestros proyectos es que usamos aguas contaminadas, aguas ácidas de mina», indicó Silván, que espera que puedan ser declarados de interés comunitario, como ha ocurrido con otros dos de similar naturaleza que Erbi prevé ejecutar en León.

No hay duda de que en la transición energética serán fundamentales los fondos que lleguen de Europa. Sobre este asunto se pronunció el consejero de Industria, Enrique Fernández, quien destacó que las previsiones son buenas. «Manejamos una cartera de proyectos que nos permiten ser razonablemente optimistas», que cifró en 205 y que movilizarán inversiones por 16.460 millones gracias a la colaboración público-privada.

A la importancia de la unión entre la sociedad civil, las empresas y las administraciones hizo alusión el presidente de Compromiso Asturias XXI, Eduardo Sánchez Morrondo: «Queremos abrir un debate abierto sobre las oportunidades que aparecen en ese escenario, no solo desde el punto de vista de la transición energética, sino también a medio y largo plazo». Mientras que el presidente del Foro Jovellanos, Ignacio García-Arango, instó a no olvidar que, desde la Ilustración, Europa ha disfrutado de una energía «mucho más barata que en épocas anteriores; si fracasamos, volveríamos a la pobreza y el desequilibrio». En la misma dirección se pronunció el presidente de la Cámara de Comercio de Oviedo, José Manuel Ferreira, que puso el acento en la urgencia de «dar respuestas que ofrezcan seguridad a la industria asturiana».