La inflación sube en Asturias al 2% pese a un menor impacto del alza del IVA en los alimentos

Hay que tener en cuenta, no obstante, que no se trata en ningún momento de que el tique de la compra se reduzca. Los alimentos siguen subiendo, pero lo hacen a un ritmo menor en comparación con un año antes. Y ahí está la clave, en el precio que tenían también en octubre de 2023, porque si la comparativa es con septiembre de 2024, es decir, con el mes precedente, hay subidas en ambos casos: en Asturias del 0,8% y en el conjunto del territorio nacional del 1,4%.

Con todo, según los datos del Índice de Precios de Consumo (IPC) de octubre confirmados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación general se situó en Asturias en el 2%, dos décimas por encima de la nacional y también dos décimas superior a la de septiembre. Es una tasa que aún está en el objetivo de precios del Banco Central Europeo (BCE), pero el repunte pone de relieve que la crisis inflacionista no está tan controlada en España como se preveía. Llaman la atención, sobre todo, los aumentos del 5,6%del vestido, del 5,5% de las bebidas no alcohólicas, del 5,1% de electricidad, gas y otros combustibles, del 4,7% de restauración y comedores, del 9,1% de los seguros o del 7,1% de los paquetes turísticos.

Por otro lado, la inflación subyacente, aquella que no tiene en cuenta los alimentos frescos ni los productos energéticos y que, por tanto, se prevé más estable, se sitúa en Asturias en el 2,6%, una décima menos que la de septiembre, aunque una más que a nivel nacional

Del lado de los alimentos, algunos se disparan especialmente en la región, como las patatas (+6,8%), el pescado (+5,8%), la carne de ovino (+9,2%) y la de vacuno (+6%) o los preparados de legumbres y hortalizas (+10,5%), mientras que las frutas frescas se rebajan un 2% y la leche lo hace un 1,4%. Sin embargo, en la comparativa mensual, de octubre con septiembre, esta última sube un 1,5% y los pescados un 3,3%.

El tipo de IVA que se aplica desde el 1 de octubre al aceite y oliva y otros productos básicos como la leche, la fruta, las hortalizas, los huevos o el pan ha pasado del 0% al 2%. Del mismo modo, el de la pasta y los aceites de semillas –como el de girasol– ha subido del 5% al 7,5%. Cabe recordar que antes de que el Gobierno pusiese en marcha la medida, allá por enero de 2023, los tipos superreducidos aplicados a los alimentos básicos eran del 4%. Y el aceite, con un IVA del 10% por entonces, no se incluía en la cesta de 'básicos', algo que sí sucede ahora y que se mantendrá cuando en enero de 2025 el gravamen recupere los niveles previos a la crisis inflacionista.