Lada (Langreo)

Restaurante Casa Adela

Casi lo vimos nacer, y saludamos, ya octogenaria, a Estrella, la madre transmisora de tradiciones. Por aquel mayo, igual que en éste, florecían las rosas, gardenias y geranios que adornan la terraza ajardinada y el techado porche del chalet de Adela, arbolado oasis con hórreo, huerta, corral y montaña que refugian la vista y el espíritu de las fábricas, chimeneas y autovías langreanas.

Y ayer como hoy permanecen los recoletos y coquetos comedores singularizados por vigas, arcones, alacenas, lámparas, relojes, espejos, visillos y colores suaves, versión asturiana de los restaurantes caseroscon pocas mesas y carta breve que, en un viaje detenido, conoció Adela por el Perigord. Eso sí, hay alguna mesa más, que la fama y la demanda no dejan de crecer, bien adentro, bien en el soleyero exterior, bien bajo la mismísima sombra protectora del hórreo.

Adela, que nació aquí mismo, lleva toda su vida aprendiendo y avanzando con la voluntad de quien ve en su trabajo un destino, una pasión, una superación. Comenzó joven a combinar estudios y fogones, pero terminados los unos, y ya convencida de que en los otros residía su vocación y don, convirtió el hogar familiar en venero personal: «Decidí trabajar aquí, y vivir con mi familia, y criar mis pollos, mis conejos, mi cerdo, mis hortalizas, mis frutales, y elaborar una cocina a la medida exacta de mis saberes, deseos y posibilidades, aportando buena parte de los ingredientes, buscando los restantes en la proximidad, y no sólo preocuparme del guiso, también curar embutidos, criar pitos, recibir o cuidar a los comensales».El todo incluido que preferimos.

Hay, pues, carta de proximidad, de raíz, de detalle, sin descuidar nunca presentaciones: ensalada templada de pulpo, revuelto de algas con gambas y oricios, arroz con almejas y pixín, bacalao con pisto, merluza del pinchu en salsa de oricios, solomillo de buey con foie, cabrito guisado con patatinos, pitu de casa o, redonda, la fabada y el arroz con leche.

El pasado miércoles se recibió nueva integrante del Club de Guisanderas. Méritos le sobran.

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