Obligan a readmitir a un trabajador que fumaba hachís y persiguió a un guardia civil
El juzgado de lo Social considera improcedente el despido, efectuado el mismo día que cogió una baja por lumbalgia
OLAYA SUÁREZ
GIJÓN.
Miércoles, 26 de octubre 2022, 01:50
El juzgado de lo Social ha obligado a readmitir a un trabajador despedido por fumar hachís en su horario laboral, perseguir con el camión de trabajo a un motorista por el centro de Gijón (que resultó ser un guardia civil fuera de servicio) y tratar de forma ofensiva a sus compañeros y también a los clientes. La empresa, dedicada a la entrega de paquetería, le rescindió el contrato «por faltas muy graves» después de seis meses de relación laboral. Sin embargo, el juez considera el despido como improcedente, pese a todos los apercibimientos anteriores y faltas por haberle entregado la carta de despido el mismo día que el trabajador cogió una baja laboral por una lumbalgia.
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«Debo declarar despido improcedente la extinción de contrato del demandante acordada con efectos al 26 de agosto de 2021, condenando a la parte demandada a que opte entre readmitir al trabajador o el abono de la indemnización de 818 euros y en el caso de que opte por la readmisión, con el abono de los salarios dejados de percibir desde la fecha del despido hasta la notificación de la resolución judicial», señala la sentencia a la que ha tenido acceso EL COMERCIO.
El empleado despedido recurrió la sentencia del juzgado de lo Social ante la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) solicitando que se condenase a la empresa al pago de 12.889 euros en concepto de las horas extraordinarias realizadas. Aunque su contrato era de 30 horas semanales, el trabajador alegaba que superaba notablemente ese horario de trabajo. prácticamente a diario, hasta las 72 horas semanales. El TSJA ha desestimado el recurso.
El agente, que circulaba en moto fuera de servicio, denunció que el operario le había intimidado con el camión de paquetería
«No puede entenderse que la actuación empresarial esté motivada por la intención de represaliar al trabajador por haber iniciado una incapacidad temporal, pues el relato histórico de los hechos no permite establecer una adecuada relación de causalidad entre ambos hechos, pues según se refleja en la carta de despido, se produjeron una serie de irregularidades en el desempeño del trabajo». El episodio de la persecución con el camión de la empresa al guardia civil fuera de servicio se produjo apenas una semana después de firmar el contrato laboral.
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