El Puerto de Gijón asfaltará el muelle Norte para ganar espacio y reducir la contaminación

Hace cinco años, apenas estaba acondicionada una superficie de unos 200 metros en línea de atraque con un ancho de 50 metros hacia el interior. Desde entonces, el Puerto ha ido efectuando sucesivos trabajos de asfaltado, con la primera línea de atraque como prioridad, dado que las tasas por la utilización de las zonas de tránsito para el almacenamiento temporal de mercancías suponen una fuente de ingresos importante y el retorno de la inversión es más rápido que para el resto de la explanada. Completada ya toda la extensión de la primera línea de atraque, con esta nueva actuación se ganará espacio hacia el interior de la dársena terrestre, en segunda línea.

A día de hoy, los primeros 500 metros de la línea de atraque cuentan con un ancho de 200 metros de explanada asfaltada -es decir, en ese primer tramo la superficie asfaltada es casi la mitad del total- mientras en el resto de la longitud del atraque solo hay unos 80 metros de interior acondicionados. Con las obras que salieron ayer a licitación, en las que el Puerto prevé invertir medio millón de euros, se unificará el suelo de los 200 primeros metros de línea de atraque, de tal forma que aproximadamente el 50% de la superficie total del muelle Norte quede acondicionada.

Así, logrará mejorar las condiciones de la superficie de explotación disponible, lo que facilitará la manipulación de mercancías entre que son descargadas en el muelle y transportadas fuera de la ampliación.

En un momento crítico para El Musel, dada la inminente aprobación del plan regional de acción a corto plazo para mejorar la calidad del aire en la zona oeste de Gijón, la pavimentación de esta zona de creciente actividad resulta clave para evitar la formación de nubes de carbón, ya que el asfalto puede limpiarse fácilmente con agua para retirar los restos de mineral del suelo.

Los trabajos entre los noráis 27 y 35, en una longitud de 230 metros y un ancho de unos 117, se llevarán a cabo en un plazo de ocho semanas y requerirán el desmonte previo de los acopios de escoria de foso existentes en la zona y el recrecido de algunas arquetas de las redes de abastecimiento, alumbrado y electricidad. A continuación se nivelará y asfaltará la zona, con el objetivo de continuar la consolidación del muelle y facilitar tanto su limpieza como la operativa portuaria.