Plan de Movilidad: una de cal y otra de arena

El Ayuntamiento de Gijón quiere introducir una serie de modificaciones en la ordenanza de Movilidad, que por cierto, acumula más de 300 enmiendas. La primera es que la prohibición de estacionamiento en la zona ORA para los vehículos gasolina matriculados antes de 2001, y los diesel matriculados antes de 2006, se retrasa un año, por lo que su aplicación será el 1 de enero de 2022.

En este sentido, y con el objeto de favorecer la renovación de los coches más antiguos, establecen el «Plan Renove Gijón», dotado con 100.000 euros anuales durante tres años, destinados a las familias con menos ingresos para la compra de coches con 'etiqueta', pero no se saben las condiciones que deben reunir dichas familias, y en todo caso, el anuncio de un Plan de Ayudas siempre se tiene que comunicar cuando es inminente su aplicación, porque de otro modo para las ventas del mercado.

Al final han recapacitado y las motos no pagarán por aparcar en la zona ORA, algo de evidente sentido común si quieren favorecer la movilidad. También está previsto establecer una tarjeta de residente en la zona rural que permita utilizar los futuros aparcamientos disuasorios. Así podemos empezar a entendernos, aplicando el sentido común, aunque ya se sabe, que es el menos común de los sentidos.