Caballo de Troya

A finales de la década de los noventa, se hizo popular en Navia una frase que pronunció el entonces alcalde, Manuel Bedia. La 'acuñó' el ... regidor popular, fallecido el pasado año, tras comprobar los vínculos que la secretaria municipal mantenía con el PSOE de Oviedo: «Me la metieron con vaselina», dijo entonces don Manuel. No sabemos si, dos décadas después, esa expresión puede emplearse para definir lo que está pasando con el Ministerio de Transportes (y añado, de Argayos, Retrasos e Incumplimientos) con Asturias. No sabemos si la supresión, por arte de magia, del vial de Jove o la paralización de las obras del nudo de Serín son dos golazos por toda la escuadra que le han metido al presidente Adrián Barbón, pero sí está claro que la cartera que dirige Óscar Puente –o más bien algún departamento– se ha convertido en una suerte de caballitos de Troya para los intereses de Asturias. Y sí, en plural, porque en lugar del imponente artilugio con el que la coalición de ejércitos aqueos tomó la ciudad, son varios los caballitos que parece que se han colado en el ministerio.