De carretera secundaria a vía principal
Las carreteras secundarias tienen un encanto especial. Lo que se alarga en el viaje, se gana en entretenimiento gracias a esa pequeña dosis de aventura ... e incertidumbre. Hace una semana, coincidiendo con los primeros avisos de la DANA septembrina, tuve que viajar desde el concejo de Valdés a Madrid. Para no volver hacia el centro de Asturias, decidí ir por Cangas de Narcea y Leitariegos. En el siglo XVIII era, tras Pajares, el puerto más importante de comunicación entre Asturias y León. Hoy, apenas pasa nadie.
Al llegar a Leitariegos, el pueblo más alto de Asturias situado en una altitud de 1525 metros, un municipal de Villablino, aparecido como un fantasma entre la niebla, me informó de que la carretera estaba cortada. Le pregunté si era por el temporal, a lo que me contestó que no, que era por el rally Valle de Laciana, y que había habido un accidente -lamentablemente, Bárbara Gómez falleció al derrapar el coche que copilotaba-, por lo que la carretera estaría más tiempo cortada. Regresé a Cangas buscando otra salida para la meseta, y allí me informaron que el antiguo camino minero trazado por Hullas del Coto era la mejor carretera para llegar al Bierzo. Efectivamente. Los habitantes de Degaña y Cerredo van, para hacer las compras, más a Ponferrada que a Oviedo. De hecho, tardan casi una hora menos en llegar a Ponferrada que a la capital de Asturias.
La carretera que antes fue de Hullas del Coto pertenece hoy, en su vertiente asturiana, al Principado. Se toma a la salida de Cerredo, a mano derecha, pero hay que estar un poco avisado, porque no hay cartel o letrero que la anuncie. De hecho, aunque el Principado pintó la línea intermedia de la carretera y mejoró el asfalto en los primeros kilómetros, no hay ninguna indicación en esta carretera que va desde Cerredo hasta Páramos del Sil, muy cerca de Toreno. Ni siquiera los carteles que habitualmente señalan la salida del Principado y la entrada en Castilla León. Y, sin embargo, esta carretera que adolece de señales, es segura, posee buen firme y atraviesa un paisaje delicioso. Indudablemente, la autovía hacia Ponferrada del siglo XXI, debería construirse sobre esta buena base de una gran vía minera que parte de Cerredo, perfectamente trazada a mediados del siglo XX.
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