Gascona, al calor de la castaña

Repartir setecientos kilos de castañas y mil litros de sidra dulce en apenas tres horas tiene su mérito y su secreto: madrugar. Ayer el Bulevar de la Sidra, Gascona, celebró su tradicional amagüestu. Una cita que arrancó bien temprano. «Empezamos a asar las castañas a las cinco y media de la mañana porque lleva su tiempo», justificó Álvaro Arias. Este amagüesteru fue el encargado de asar el fruto seco que tuvo poco de asturiano. «Las castañas vienen del Bierzo porque en Asturias este año casi no hay, debido a que los castaños están secos porque los dañó la avispilla», un insecto que daña el árbol e impide que dé fruto, explicó.

Pero esto no fue inconveniente para que centenares de ovetenses y turistas disfrutaran del manjar. Vinieron hasta de Italia. «Esto también lo hacemos en nuestro país pero en vez de con sidra, a la castaña la acompañamos con un vino dulce», matizó Vincenzo Esposito, que se encuentra de Erasmus en la ciudad junto a cinco compatriotas.

«La sidra está buenísima pero la castaña está un poco quemada y le falta sabor», se lamentó Rocío Carril. Pero todo quedó compensado por el buen ambiente que vivió ayer la calle donde la música, a cargo del grupo La Xarangana, animó con su mezcla de sones. «Tocamos de todo, la mezcla en la música ye lo bueno», defendió Inda Santos. «Presta mucho y así da gusto», espetó Loli Alcántara mientras esperaba turno para hacerse con su cucurucho de castañas.