«Nunca he visto tanto cariño en mi vida; estamos impresionados»

Los Reyes Magos recorrieron esta tarde el centro de Oviedo en la tradicional cabalgata que tuvo una duración de dos horas. El año pasado no lo pudieron hacer por culpa de la pandemia, pero este año han desfilado con un séquito formado por mil personas, que repartieron quinientos kilogramos de caramelos, y llenaron de ilusión las calles del centro de la capital asturiana. La comitiva partió a las 18.30 horas delante de la Escuela de Minas custodiados por un fuerte dispositivo policial.

Tanto Melchor como Gaspar y Baltasar saludaron a los presentes desde sus carrozas de las que se bajaron al llegar a la plaza de la Catedral. Allí realizaron la tradicional adoración al Niño Jesús ante la presencia del equipo de gobierno con Alfredo Canteli a la cabeza. Además, Melchor confesó sentirse emocionado porque «nunca he visto tanto cariño en mi vida; estamos impresionados». Prosiguió dando la enhorabuena a la ciudad «tan bonita que tenéis porque, sobre todo, los niños son un espectáculo».

Tras estas palabras continuaron hasta la Escuela de Minas donde se bajaron de las carrozas para emprender el viaje por el que dejarán en casa de todos los niños los regalos.