El empoderamiento femenino no es solo cosa de cuentos

Perfectas, espléndidas, dispuestas y muchas veces en un segundo plano. Así son muchas de las referencias femeninas que aparecen en la literatura a lo largo de la historia. La escritora feminista Virginia Woolf describió en 'Una habitación propia' cómo serían sus congéneres en la vida real si fuesen un reflejo certero de los perfiles que aparecen en los libros de ficción: «Si la mujer no hubiera existido más que en las obras escritas por los hombres, se la imaginaría uno como una persona importantísima; polifacética: heroica y mezquina, espléndida y sórdida, infinitamente hermosa y horrible a más no poder». Pero este no es un tema mundano. Las obras literarias, como prácticamente todo en la sociedad, ayudan a perpetuar estereotipos y roles de género que provocan, entre otras cuestiones, que las niñas comiencen a sentirse menos inteligentes que los niños a partir de los seis años, tal y como revela una investigación publicada en la revista 'Science' en 2017. Sin embargo, existen numerosos libros en los que sus protagonistas femeninas rompen con todo lo establecido y se forjan una personalidad propia y empoderada, todo un referente para otras mujeres.

Así, por ejemplo, 'Yo voy conmigo', de Raquel Díaz Reguera, ayuda a reflexionar a niñas y niños sobre la búsqueda de la aprobación de otras personas con un potentísimo mensaje: «¿Estamos dispuestos a cambiar lo mejor de nuestra forma de ser para gustarle a los demás? ¿Vale la pena?»

La obra destinada a un público infantil-juvenil 'Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes', de Elena Favilli y Francesca Cavallo, narra la historia de cien mujeres brillantes cuya vida ha marcado de algún modo el devenir de la sociedad: Marie Curie, las hermanas Brontë, Nina Simone o Frida Kalho son algunos de los nombres propios que servirán de referentes a las mujeres del futuro y que también ayudará a abrir la mente de los niños.

'No me cuentes cuentos' es un título con una estructura similar al anterior, pero con una sutil diferencia: las cien mujeres que aparecen en el libro son españolas. De esta forma, los más jóvenes pueden descubrir, por ejemplo, los logros de la matemática gallega María Josefa Wonenburger Planells o de la asturiana Margarita Salas, «pionera mundial en biología molecular y una autoridad en su campo, además de un referente fundamental para las mujeres científicas en España y en el mundo», tal y como se puede leer en sus páginas.

Los libros 'Am I Normal Yet?', '…And A Happy New Year' y 'What's A Girl Gotta Do?', de Holly Bourne, componen una trilogía perfecta para que las jóvenes reflexionen sobre el sexismo, el acoso, la sororidad y el feminismo gracias a la narración de las historias de tres amigas. Las obras de Bourne se pueden leer en inglés, por lo que, además, es una buena opción para reforzar el idioma.

El empoderamiento y la reflexión también llega a los jóvenes en forma de poesía y un buen ejemplo de ello es el libro 'Miedo a los perros que me han dicho que no muerden'.Esta obra de Javier García Rodríguez, cuyo título pertenece al poema 'Miedo', de Raymond Carver, relata en forma de verso la cotidianidad de la vida de los adolescentes. Eso sí, siempre con un enfoque de género y con una perspectiva feminista.

El escritor Octavio Salazar considera que esta perspectiva de género no es un tema exclusivo de las mujeres y por eso ha publicado '#WeToo: tu lucha, mi lucha', un título directo y sencillo dirigido a chicos y chicas adolescentes, pero también a sus padres y a sus profesores. El libro ayuda a tomar conciencia sobre los «modelos machistas que se resisten a desaparecer y que incluso se han reforzado en los últimos años», resalta la propia obra.

Para los aficionados a los relatos ilustrados, 'La Cenicienta que no quería comer perdices' puede ser la elección ideal. La obra narra cómo cambiaría el tradicional cuento si la protagonista fuese una mujer rebelde, vegetariana, que odia los zapatos de tacón y que nada tiene que ver con las princesas convencionales. Este libro ilustrado explora la sororidad, el hartazgo y el desarrollo de la personalidad hasta llegar al empoderamiento.

La tolerancia, la lucha y la libertad son los símbolos de 'Persépolis', de Marjane Satrapi, una de las novelas gráficas más aclamadas de los últimos años. Este relato autobiográfico comienza en 1979 en Irán, cuando la protagonista, Marji, tiene 10 años. La religión, la política y una sociedad cambiante sirven de escenario para narrar sus sueños, la lucha familiar, con la fe y con las costumbres.

Previsiblemente los lectores más empáticos pasarán un duro trago al leer la novela 'Mil soles espléndidos', de Khaled Hosseini, si bien es cierto que se trata de otra fuente de inspiración y de empoderamiento. Un matrimonio forzoso cuando la protagonista tenía solo 15 años, la guerra de Afganistán, la cultura e historia islámica y una férrea amistad entre Mariam y Laila, dos mujeres fuertes y luchadoras, son los rasgos principales de un relato duro a la par que apasionante.

'El cuento de la criada' es un libro que sigue indignando a cualquier lector, aunque ya hayan pasado varias décadas desde que Margaret Atwood describió esta distopía surgida tras una guerra en Estados Unidos (en la novela, el país se rebautizó como República de Gilead) en la que ganaron los fundamentalistas religiosos. El libro describe una sociedad en la que las mujeres solo pueden tener cuatro papeles: instruir a otras mujeres en los valores fundamentalistas, servir, ser la mujer sumisa perfecta o engendrar (aunque no criar a sus bebés). Este último rol, el de gestante, es el que ocupan las criadas a las que Offred, la protagonista, les da voz. Los 'flashbacks' de su vida pasada, cuando era una mujer trabajadora, madre de una niña y esposa de un marido que la respetaba, hace reflexionar sobre la volatilidad de los derechos conquistados durante siglos de lucha.