Carmen Calvo hace una encendida defensa de la «memoria democrática» en el homenaje a Del Riego

«Lo que está en el pacto constitucional nos permite existir a todos, lo que esté fuera no». Con estas palabras reivindicaba esta mañana la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, Carmen Calvo, la Carta Magna como el mejor marco de convivencia posible. Las palabras de Calvo, pronunciadas durante el homenaje a Rafael del Riego en la localidad tinetense de Tuña, dejaron también una advertencia: toda modificación que se pretenda hacer al texto deberá vehicularse a través de los «procedimientos previstos y no por otros. Hay muchos que no lo quieren entender, pero para eso estarán las instituciones de este país».

En un acto al que también acudieron el presidente del Principado, Adrián Barbón, el presidente de la Junta, Marcelino Marcos Líndez, la portavoz del PSOE en el Congreso, Adriana Lastra, el alcalde de Tineo, José Ramón Feito y el alcalde de Las Cabezas de San Juan, Francisco José Toajas, Carmen Calvo hizo una encendida defensa de la «memoria democrática» y señaló que la ley sobre esta materia que prepara su departamento se encuentra ya «a las puertas del Congreso». «No podemos perder la memoria, sin ella no tenemos identidad posible», afirmó sobre un asunto que, enfatizó, «forma parte de la agenda del estado».

Con la historia de Rafael del Riego como hilo conductor -este año se celebra el bicentenario de su pronunciamiento constitucional que dio lugar al trienio liberal y que acabó por costarle la vida-, Adrián Barbón insistió en una idea que se ha vuelto una constante en su discurso: la necesidad de que «la voz de Asturias sea escuchada» en Madrid. Aunque la mayor parte de su discurso estuvo centrado en la defensa de los valores constitucionales. «Sabemos que el trienio liberal terminó mal», pero «fue un paréntesis de claridad en medio de dos oscuras paredes de absolutismo». El recuerdo histórico dio paso a la reivindicación del presente. «Está bien recordarlo. Conviene hacerlo cuando algunos relatos cuestionan el pacto constitucional vigente, unos porque lo ven como una especie de concesión del franquismo, otros porque ponen en duda la articulación constitucional del estado».

Adrián Barbón recordó que el texto de la Constitución «no está esculpido en piedra y puede reformarse. Pero eso no puede llevarnos a desdeñar cuánto hemos avanzado en esta ya larga etapa constitucional».

El presidente del Principado recordó además en sus palabras el momento que vive la sociedad en este momento, con una pandemia que ha provocado una crisis sanitaria, social y económica. En una situación así, Barbón incidió en la necesidad de lograr un gran pacto que deje a un lado los intereses partidistas, «aunque solo sea por respeto a los enfermos de coronavirus».

Por su parte, el alcalde de Tineo tuvo, además de palabras de recuerdo y homenaje a Rafael del Riego, una reivindicación: que los distintos gobiernos logren traer al suroccidente asturiano inversiones y empleo estable que palien la dura situación por la que atraviesa la zona y que tiene mucho que ver con el proceso de descarbonización. «La transición ecológica debe ir acompañada de inversiones e infraestructuras», reclamó. José Ramón Feito defendió además que la «nación española no puede ser patrimonio de ninguna familia o persona» y afirmó que «la ley y la justicia deben ser igual para todos, sin excepción», unas palabras que llegan tras conocerse los supuestos ilícitos fiscales que se imputan a Juan Carlos I, quien ha decidido abandonar España.

Tras los discursos llegó la ofrenda floral en el monumento a Rafael del Riego y la interpretación de su himno. De entre los asistentes, algunos luciendo en banderas o en la ropa los colores republicanos, surgieron los vítores de «viva Riego» y «viva la república», que dieron paso a un paseo hasta la casa natal de Rafael del Riego con el que se culminó el acto.