«Si la pandemia se recrudece analizaremos el fondo de rescate»

–No se puede cantar victoria pero el presupuesto está muy bien encarrillado, con un acuerdo con IU y una amplia mayoría parlamentaria dispuesta a facilitar que supere el trámite de enmienda a la totalidad. Sin quitar mérito al PSOE, ¿esto hubiera sido posible sin pandemia?»

–Siempre trabajamos con el objetivo de alcanzar un acuerdo amplio y no es la primera vez que el Gobierno lo consigue, como ejemplo está la Concertación Social o el pacto en relación a la financiación autonómica. Peo también es cierto que es una situación excepcional que requiere una mayor voluntad de diálogo y generosidad, no solo por parte del PSOE, sino del resto, y que la hemos encontrado en estos cuatro partidos.

–Se ha conseguido un presupuesto histórico, que supera los 5.000 millones, principalmente recurriendo a la deuda. ¿Está justificado este endeudamiento?

–Es un presupuesto para un tiempo excepcional, para tratar de dar respuesta a una crisis sanitaria, social y también económica y, efectivamente, se ha recurrido a los mecanismos de endeudamiento de manera muy responsable. Se han movilizado todos los recursos porque es lo que teníamos que hacer en una situación como ésta.

–Lo que parecía el principal escollo, la reforma fiscal, se ha quedado aplazada. ¿Ha sido una imposición de Ciudadanos y Foro o una decisión del PSOE al entender que no era el momento?

–Hemos querido trabajar por un acuerdo lo más amplio posible, porque lo que está en juego es el futuro de muchos asturianos, y por eso se decidió no abordar cuestiones como la subida o la bajada de impuestos, para garantizar su aprobación.

–¿Si tuvieran mayoría absoluta los hubieran tocado?

–El PSOE no la tiene, así que trabajamos en este contexto.

–¿Habrá reforma fiscal en la línea que reclama Podemos antes de que acabe la legislatura?

–Nuestro horizontes de negociación se limita a 2021 y así se lo hemos trasladado a todos los partidos. Ni fuimos más allá con la izquierda en relación a fiscalidad ni con los otros partidos que nos pedían otro tipo de acuerdos más allá de ese horizonte. A todos les emplazamos a sentarse a negociar dentro de un año.

–La estrella de este presupuesto ha sido el fondo de rescate y, sin embargo, a nadie le parece suficiente. ¿Qué cálculos se han hecho para fijar esa cifra y no otra?

–Es un fondo de rescate que se suma a los 33 millones de este año que se van a empezar a repartir la próxima semana, en el que hemos teniendo en cuenta ya algunas reivindicaciones de los grupos como que se tuviera en cuenta a sectores afectados indirectamente por los cierres o que las ayudas estuvieran exentas. Es fruto del diálogo con los partidos y teniendo en cuenta la previsión que hay para 2021 de una vacuna, pero también de una tercera ola en enero. Pero también hay que tener presente que si en 2020, cuando no habían ningún tipo de previsión pensada para dar respuesta a una pandemia, se ha sabido reaccionar con un fondo de 33 millones, no hay duda de que si la evolución de la pandemia fuera desfavorables a lo largo de 2021 el Gobierno volvería a estar a la altura para no dejar a nadie atrás.

–¿Quiere decir que el Gobierno estaría dispuesto a pedir un crédito extraordinario para ampliar el fondo si fuera necesario, como pide Podemos?

–Seguimos hablando con los partidos porque están haciendo aportaciones muy interesantes en este sentido, pero si la situación se recrudeciera tenemos el compromiso de analizar el fondo con el resto de los partidos que apoyen el presupuesto y buscar una respuesta. No vamos a mirar hacia otro lado.

–Economistas y empresarios también ven escaso ese fondo. Hoy por hoy, ¿hay margen para aumentar la partida?

–Cien millones de momento es un fondo muy importante que animo a comparar con el de otras comunidades. Pero el presupuesto no solo recoge el fondo de rescate, también incluye otras medidas de apoyo al sector económico como son ayudas para dinamizar el turismo, la digitalización el comercio, aplazamientos de cobros de tributos y avales. Y no podemos olvidarnos que tiene que ser un presupuesto ponderado en el que no se pueden mirar solo desde una óptica, porque para salir de esta crisis también hay que reforzar la sanidad con más personal, y dotar de más recursos al ERA. Quién pide incrementar el fondo que diga de dónde quiere quitar.

–Al margen de Vox, con el que ustedes no han querido negociar desde el primer momento, únicamente quedaría el PPpor decidir si presenta enmienda a la totalidad y Teresa Mallada ha dicho que hay margen para mejorar las cuentas. ¿En qué ámbitos podrían llegarse a acuerdos con el PPa estas alturas?

–El PP pidió primero exclusividad, luego un trato preferente y después terminó por excluirse y dejar pasar el tiempo mientras otros negociaban sus propuestas. Deberían volver a escuchar a Pablo Casado en la moción de censura para que recapaciten y se independicen de Vox. La puerta sigue abierta y la gente estaba esperando otra cosa de ellos en estos momentos.

–El PP es muy crítico con las cuentas mientras su principal alcalde, Canteli, las aplaude. ¿Qué lectura hacen de esto en la FSA?

–El PP debería escuchar a sus alcaldes, no solo al alcalde de Oviedo, y pensar más en Asturias y no solo en tacticismos e intereses partidistas.

–Se ha incrementado la inversión en Oviedo y tanto Canteli como Ciudadanos se han atribuido el mérito. ¿Con quién se negociaron esas inversión, con el alcalde, con la formación naranja, o con ambos?

–Los presupuestos se votan en la Junta y, aunque ya me gustaría a mi que se tuviera en cuenta la opinión de los alcaldes para su aprobación, la realidad es que las cuentas se negocian con los partidos y Ciudadanos ha tenido muy en cuenta al municipio de Oviedo en esta negociación.

–Canteli también le hizo directamente sus reivindicaciones a Barbón. ¿No se tuvieron en cuenta?

–El Gobierno escucha a todos los alcaldes, no solo con Canteli, y somos conocedores de todas sus demandas. Que el PPno se sume a la negociación no quiere decir que vayamos a castigar a sus alcaldes. No es nuestra forma de gobernar.

–Con Ciudadanos se llegó a un acuerdo el año pasado que, hora antes de la votación, se truncó por una llamada de Madrid. ¿Temieron o temen que esto vuelva a suceder?

–No solo con Ciudadanos. Aunque en estas semanas fuimos construyendo una confianza necesaria para trabajar con sinceridad, el miedo no podemos perderlo nunca porque tenemos experiencias de este tipo no solo con Ciudadanos, sino también con otros. No nos podemos relajar y no lo vamos a hacer hasta que el presupuesto esté aprobado. No se puede cantar victoria aún y no bajamos nunca la guardia con ningún partido.

–¿Cuáles fueron las cesiones más complicadas que ha hecho el Gobierno regional en esta negociación?

–Hay propuestas con las que nos sentimos más cómodas y otras con las que menos, pero hemos intentado acercarnos a sus propuestas lo máximo posible teniendo en cuenta que los recursos son finitos y que no podemos atender un área para desatender otra. Hubo muchas cesiones a las que fue complicado buscarles encaje, pero con esa disposición nos enfrentamos a la negociación.

–El Gobierno central ya ha conseguido aprobar los presupuestos con un amplio apoyo parlamentario, aunque en este caso se descolgó Ciudadanos mientras Unidas Podemos le daba un papel destacado a Bildu. ¿Le incomoda esto? ¿Hubiera preferido un pacto con Inés Arrimadas?

–A la FSA lo que le importa es que haya un presupuesto de España porque es más necesario que nunca y que sería perfecto si se suma aun presupuesto de Asturias. Hay declaraciones que solo pretenden hacer ruido y crispar el ambiente y yo les recordaría que en España ya no existe terrorismo y que dejen de utilizarlo en un momento como éste. Lo importante es que hay presupuestos y que suponen un escudo social para rescatar a las personas y que incluyen importantes inversiones para esta región. Nosotros ya hemos dicho que apoyamos esta negociación por parte del PSOE, un partido vivo que se sabe adaptar a cada momento y a cada situación.Y ahora la política ha cambiado y requiere demás diálogo porque con posturas rígidas no se solucionan los problemas de la gente.

–Adriana Lastra ha respondido a las críticas internas del partido diciendo que tocaba a una nueva generación gobernar, lo que ha enfadado a históricos como Felipe González. ¿Sigue abierta la brecha en el PSOE?

–Son normales los debates pero lo que debemos garantizar es la estabilidad que necesita el país. Yo admiro a compañeros como JuanCofiño, con gran experiencia política, que jugaron un papel importante hace años y ahora se han adaptado a esta nueva realidad política, no digo que más o menos fácil, pero sí diferente.

–¿Qué valoración hace del primer año del Gobierno de coalición?

–La valoración es muy positiva teniendo en cuenta que no es un año normal. Este Gobierno ha hecho frente a la crisis dando una respuesta social, rescatando a las personas que más lo necesitaban, con ERTEs, con subida de pensiones, y con unos presupuestos que han tenido muy en cuenta a nuestra región, algo que no ocurría con los presupuestos del PP.

–Hay sin embargo algunas reivindicaciones por parte del Gobierno regional, como el estatuto para las electrointensivas, rebajas en el Huerna o mejora de infraestructuras, que no acaban de ser escuchadas por el Ejecutivo central. ¿La FSA, con línea directa con Ferraz, ha tomado alguna iniciativa al respecto?

–El presupuesto del Gobierno central demuestra claramente que Asturias está muy presente en la agenda política de Madrid. Que el Gobierno de España y Asturias tienen una relación fluida es evidente y de hecho hay grandes proyectos en marcha. Tenemos una posición legal, pero también exigente, y por supuesto el presidente asturiano y secretario general utiliza todos los cauces de comunicación abiertos para alzar la voz por los intereses de Asturias.