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Abel Bretones, revelación del curso para los azules. JUAN CARLOS ROMÁN

El Oviedo renueva a Abel Bretones hasta 2026 y con ficha del primer equipo

El extremo, apuesta de Bolo en pretemporada, fue llamado por falta de efectivos en banda y se ha ganado un hueco por su rendimiento en Liga

M. SUÁREZ

OVIEDO.

Sábado, 22 de octubre 2022, 02:54

Si alguna impronta positiva ha dejado Jon Pérez Bolo en su breve paso por El Requexón, esa ha sido la de apostar por Abel Bretones ( ... La Felguera, 2000). El jugador del filial, que se incorporó al Vetusta a mitad de la temporada 2021-2022, fue clave para el técnico vizcaíno en el arranque de la competición liguera y su apuesta por él le ha servido al atacante para, no solo renovar su contrato, sino también ganarse un hueco en el primer equipo azul.

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El extremo seguirá siendo jugador carbayón hasta junio de 2026 y lo hará, además, como futbolista del primer equipo. A ese acuerdo han llegado jugador y club después de que el langreano participase en 9 de los 11 encuentros que se llevan disputados de liga, jugando cuatro de ellos como titular en el flanco izquierdo del ataque oviedista.

El futbolista asturiano, que también tuvo un papel importante en el ascenso del Vetusta la pasada campaña, fue llamado a hacer la pretemporada con el primer equipo este verano, y su rendimiento le valió para convertirse en el único jugador del filial que se mantuvo de manera constante en las convocatorias de Bolo. El premio le llega ahora, tres meses después, en forma de nuevo contrato con el conjunto oviedista, ampliando así un acuerdo que llegaba a su fin este mes de junio.

La andadura de Bretones en el club que ahora dirige Pachuca comenzó a pocas horas de que finalizaces el último mercado invernal, momento en el que el de La Felguera aterrizaba en el Vetusta de Jaime Álvarez para ocupar la plaza que dejaba libre el también langreano David Iglesias.

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El extremo aportó verticalidad a la banda izquierda del filial, necesitada de perfiles desequilibrantes como el suyo. Disputó un total de ocho partidos y adquirió un papel importante, sobre todo saliendo desde el banquillo. Solo la pérdida repetina de su hermano, en la última semana del campeonato liguero, impidió que tomase parte también en el decisivo partido del Vetusta ante el Colunga. Desde entonces esa estrella le ha acompañado, y Bolo supo fijarse en su talento con la zurda y en su capacidad para cubrir todas las demarcaciones exteriores. Las necesidades de la plantilla, que en pretemporada no tenía aún atados ni a Borja Sánchez ni a Marcelo Flores, le abrieron la puerta del primer equipo, y fue luego, durante la competición, cuando su rendimiento le hizo ser la opción predilecta ante la irregularidad del resto de efectivos de banda, muchos de ellos con problemas físicos.

Esta renovación forma parte también del legado que deja Tito Blanco como director deportivo. Misma situación vivida en el verano con Reyes y Samu Obeng, ya que la ampliación de contrato del delantero la dejó firmada el gijonés cuando ya ponía rumbo a Getafe, en su caso y a diferencia del alicantino voluntariamente.

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