«Primero está la gente, yo soy uno más y tengo que respetar»

El club anunció que ayer se habían alcanzado los 14.500 abonados, mil más que el día anterior, de los que 700 correspondían a nuevas altas.

El primer día para las altas de abonados trajo largas colas de aficionados tanto en la tienda oficial, como en las oficinas del Carlos Tartiere, en algunos casos, de hasta dos horas.

El nuevo propietario del club acudió a la cita poco después de las seis de la tarde y se puso a la cola con el resto de aficionados que esperaban. Se mostró sorprendido por el largo tiempo de espera que tenían que guardar los aficionados y se interesó por cómo se estaba realizando el proceso. Su conclusión fue clara: «No puede esperar la gente tanto, el próximo año tenemos que tener más cajas, no puede seguir así tenemos que darles servicio».

No obstante, en ningún momento perdió la sonrisa y atendió a los muchos aficionados que se dirigieron a él. Unos le pedían el ascenso, otros, la mayoría, una fotografía. También recibió palabras de agradecimiento por su llegada al club y por los primeros pasos de su gestión en cuanto a fichajes y por la ampliación de capital.

Un joven aficionado se acercó al dirigente y le espetó «¿para cuando Juanín?» en referencia al fichaje del ovetense Mata. Jesús Martínez sonrió y le dijo «cuando él quiera» y a continuación bromeó diciéndole que «ya ganó dinero suficiente, puede venir a jugar gratis cuando quiera».

También aprovechó para hacer un improvisado balance de los primeros días en Oviedo. «Estamos muy contentos. Seguimos trabajando muy duro, no hemos parado de trabajar en muchas cosas, como la ampliación de capital», resumió.

Además, ante las palabras de los aficionados sobre el ascenso, reconoció que «presión siempre la tenemos, más con el cariño y la pasión de la gente. Se han volcado con el equipo, eso siempre lo vamos a agradecer y tenemos esa gran responsabilidad». La responsabilidad de ellos como dirigentes es «darles resultados».

Su ambición es que el equipo «se comprometa con todo el esfuerzo que estamos haciendo y demuestre el compromiso con la gente que los está apoyando». Insistió en que percibe mucha ilusión y que eso les hace tener «más pasión todavía para este nuevo reto. Estamos para trabajar en el Oviedo».

En principio, su idea era abandonar Asturias el 14 de agosto, día de su cumpleaños. Sin embargo, cambió de planes. «Tuve que cancelarlo porque quiero quedarme hasta el primer partido de Liga y me iré para México el 16». Martínez asegura entre risas que no quiere regalos por su aniversario, «el mejor regalo es la victoria para la gente, lo más importante es la afición». No obstante dijo que ya sabía que en el primer partido nunca se había ganado: «Hay que romper eso».

Cuando le llegó el turno pidió un asiento en la zona de «las porras» (nombre con el que se deniminan los ultras en México). Cuando le explicaron que en el Fondo Norte ya no había localidades pidió una en la zona cercana a los banquillos, «para tener cerca al entrenador».

Cuando ya estaba en la calle y a la vista de la importante cola de aficionados que todavía esperaba, volvió a entrar en la tienda para hablar con las empleadas y decirles que no podían cerrar hasta que se atendiera al último oviedista. Las empleadas le trasladaron que eso es lo habitual y lo que siempre hacen.

Ya en la calle seguían los aficionados solicitándole fotos y charlando con él. Un momento curioso se produjo cuando las empleadas de una tienda que está al lado de la del club le dijeron que iban a hacerse una foto, pero antes quisieron llamar a una compañera, que era la madre del centrocampista Borja Sánchez. Jesús Martínez pidió al fotografo del club que le tomara una instantánea que se la quería mandar al futbolista.