Entrenamiento de fuerza, por qué debes introducirlo en tu vida

Hasta no hace mucho si se hablaba de entrenamiento de fuerza, la primera idea que se venía a la cabeza era una persona hipermusculada levantando pesas. En los últimos años, esa percepción está cambiando y son muchas las voces que se han levantado explicando las bondades de practicar esta disciplina.

Para entrenar fuerza no es necesario levantar mucho peso, de hecho, ni siquiera es necesario tener ningún material para realizarlo. Se puede trabajar simplemente con el peso de tu propio cuerpo y, lo bueno, es que está recomendado para cualquier edad. Marcos Vázquez, el asturiano creador de 'Fitness revolucionario' explica que es apto para cualquier persona «los adolescentes pueden entrenar fuerza sin problema, aunque idealmente usando su propio cuerpo al principio. En personas mayores, de más de 70 años, se han visto también efectos muy positivos al entrenar fuerza. Se trata simplemente de adaptar los ejercicios y los pesos a la situación inicial de cada persona».

Quiere desterrar también la creencia popular de que las mujeres que entrenan fuerza pueden llegar a estar demasiado musculadas, «ganan masa muscular al entrenar fuerza, claro, y eso es bueno. No solo mejora su salud (reduciendo por ejemplo el riesgo de osteoporosis) sino que añadir algo de masa muscular potencia sus curvas naturales y mejora la estética global. Es muy difícil para una mujer crear demasiada masa muscular o llegar a verse «masculina», y si eso llegase a ocurrir simplemente podrían entrenar menos. Pero insisto, para eso deberían entrenar muchas horas al día durante mucho tiempo».

Como en todos los deportes, hay que empezar a practicarlo adaptándolo a la forma física de cada uno y poco a poco. Según Vázquez «Lo mínimo recomendable serían 2 sesiones de fuerza a la semana, de 30-45 minutos, aunque lo ideal sería realizar 3-4 sesiones semanales de fuerza».

Son muchos los beneficios que el fitness puede aportar, desde modelar el cuerpo, hasta ganar resistencia y flexibilidad, pero también, para la mente. Estos son algunos de ellos:

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Son muchas las ventajas de practicar estas rutinas, Vázquez las resume en que «es la mejor manera de preservar la masa muscular con la edad, y el músculo es mucho más que un tejido contráctil. Produce multitud de compuestos que mejoran la salud, además de ayudarnos a vernos mejor. En personas mayores, el entrenamiento de fuerza es la mejor estrategia para evitar la fragilidad y la dependencia».

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