Sporting

Marcelino: «El Sporting está ahora más necesitado de presente que de futuro»

El técnico comentó que «la temporada pasada sufrimos bastante y esta llevamos el mismo camino, aunque ojalá se mantenga la categoría y sufriendo menos». Esta circunstancia, que se repite tras el agónico fin de curso del verano pasado es la que, en opinión de Marcelino, «debe hacernos también reflexionar sobre lo que no se hace bien». «A la vez, debemos darnos cuenta de que el Sporting, como club histórico, la ciudad de Gijón y la grandísima afición deben obligar a los dirigentes a hacer un proyecto serio y con capacidad, no de palabra sino de acción, para tener opciones reales de subir a Primera División», añadió.

Unas posibilidades de ascenso, que para Marcelino «no eran viables» en la presente temporada, porque «hay que reconocer que este año hay cinco equipos muy poderosos». «También es lógico porque hubo un cambio de estructura, de gestión y dirección, pero con un año de experiencia, la temporada que viene tiene que haber el suficiente análisis y decisiones para hacer del Sporting un equipo que esté en la parte alta de la tabla», argumentó.

El de Careñes tampoco esquivó el análisis de la situación a la que se enfrenta el técnico rojiblanco, Miguel Ángel Ramírez, bajo la «ley de que cuando no ganas partidos el entrenador se va». Sin embargo, Marcelino, más allá de que el equipo tenga problemas con los ocupantes del banquillo, puso el acento en que «me da la sensación que lo que falta es un proyecto serio, solvente y continuado». La receta para paliar estas deficiencias es sencilla: «Lo que deben hacer el entrenador, con la dirección deportiva y la gestión del club, en la pretemporada o en la planificación es un proyecto serio y con capacidad futbolística suficiente para poder luchar de forma realista por los objetivos que se pretenden».

Gran conocedor de la Escuela de Fútbol de Mareo, donde se formó como jugador desde los trece años, Marcelino también opinó sobre el proyecto de Orlegi para convertirlo en un centro de alto rendimiento con una academia internacional. «Todo está bien, cuanto mejor es la infraestructura que te permite una mejor formación, fenomenal, es inversión y capacidad de generar», explicó para, a continuación, pasar de la impresión general al caso particular del club rojiblanco.

«Aquí no podemos engañar a nadie, el que da de comer a todo eso y el que te va a permitir atraer y retener talento es que tu primer equipo funcione y esté en Primera División y lo más arriba posible», argumentó. Si no se da esa circunstancia, García Toral lo tiene claro: «Las grandes canteras de España y de Europa se llevarán a los mayores talentos». «Formar es muy bonito, es lo que te da identidad, pero lleva mucho tiempo», añadió Marcelino, antes de zanjar que, así las cosas, «el Sporting está ahora más necesitado de presente que de futuro».

Y eso que está aprovechando esta temporada sin dirigir ningún equipo para «disfrutar de amigos, familia y no estar atento al fútbol». El de Careñes aseguró que sigue esperando «de forma paciente» un proyecto que le ilusione, aunque reconoció que «iniciar un proyecto a mitad de temporada siempre es difícil porque viene a indicar que algo no funciona y modificar eso no es sencillo». En este sentido, bromeó que «ya hemos tenido tres experiencias, que resultaron muy buenas, en casi veinte años de profesional y ya son suficientes».