La minería prepara el regreso a los tajos

La decisión no está tomada, a la espera de lo que ocurra este mediodía durante la reunión que sindicatos y patronal mantendrán en el Ministerio de Industria, pero todo indica que la minería asturiana podría poner fin en las próximas horas a una huelga indefinida que hoy cumple su jornada 63. El sector se prepara ya para un inminente regreso a los tajos después de que los mineros de Aragón anunciaran el domingo que mañana volverán al trabajo. Lo que está menos claro es si las federaciones de UGT y CC OO adoptarán en Asturias la decisión de manera conjunta o no, como ocurrió el domingo en Aragón. Ayer, por lo pronto, sus representantes optaron por estudiar la estrategia a seguir por separado. Ninguna quiere desvelar sus cartas aunque la más proclive a la posible desconvocatoria de la huelga es CC OO, que ayer celebró una asamblea informativa con sus afiliados de la minería pública y privada, en torno a 500, para analizar el conflicto.

Primero se reunieron en Nalón, luego en Caudal y finalmente en Oviedo donde hoy mantendrán una asamblea permanente para tomar una decisión definitiva sobre el conflicto una vez conozcan las noticias que llegan de Madrid. Su secretario general, Maximino García, adelantó ayer que las movilizaciones que el sector ha mantenido hasta ahora han conseguido «escasos o nulos resultados» por lo que es necesario, dice, «cambiar la metodología de la negociación».

«Las medidas que está tomando el Gobierno con el resto de sectores nos deben hacer a los sindicatos no parcializar los conflictos sino aglutinar de manera clara todo lo que está aconteciendo en el país creando una masa crítica, no sólo de la minería sino de la sociedad en general, que impulse movilizaciones contundentes para que el carbón tenga una solución igual a la del resto de sectores, pero no de manera aislada», argumentó tras recordar que «siempre manifestamos que esto era un conflicto a largo plazo y no se puede mantener la huelga indefinida. Somos los primeros que debemos intentar que eso no se dé», advirtió un día después de que los mineros de Aragón decidieran descolgarse de la huelga.

El sindicalista no ocultó su pesimismo ante la nueva reunión con Industria tras los «nulos» avances logrados hasta ahora. CC OO la afronta con el objetivo de que el Gobierno ponga los mecanismos necesarios para que ninguna empresa vaya al cierre este año. «A partir de ahí estamos dispuestos a hablar del nuevo plan minero», apostilló.

Pero a la luz de las declaraciones que el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, realizó la semana pasada en el Congreso esa posibilidad parece muy lejana. El ministerio se ha marcado como objetivo prioritario sacar adelante con la mayor brevedad posible un nuevo plan del carbón 2013-2018 que se muestra dispuesto a ejecutar en solitario. Tendrá como eje central la reindustrialización de las comarcas mineras después de que, según criticó, en los últimos 22 años la atención haya estado mucho más centrada en maximizar el volumen de ayudas que en encontrar una alternativa real para esos municipios.

Hoy no será Soria quien se reúna con los representantes sindicales y de la patronal que acudirán al ministerio, sino el secretario de Estado de Energía, Fernando Martí, y tampoco el formato de la reunión coincidirá con el de una comisión de seguimiento al uso.

Como ya ocurrió hace algunas semanas, Industria sólo ha invitado al encuentro a dos representantes de la parte sindical y de la patronal a quien las centrales pidieron ayer que «deje la ambigüedad» y «diga con claridad qué recortes asumen y qué producciones, empleo y salarios van a garantizar». «Queremos que se postule, porque no se ha pronunciado claramente y siempre se han mantenido en medio de la cuerda», aseguró un representante de CC OO. Por su parte, desde la patronal minera confesaron que mantienen pocas esperanzas en que la reunión de hoy ayude a desbloquear el conflicto.

Lo que está por ver es la decisión que adoptará el otro sindicato con quien las relaciones, según reconoció ayer García, no pasan por su mejor momento y que mantiene a diez de sus afiliados encerrados en los pozos. «Seguimos pensando que la guerra en solitario no se gana y que hay que intentar unificar criterios para buscar una salida al conflicto, pero nosotros no rompimos ninguno de los acuerdos y quien rompe los acuerdos es quien tiene que intentar sentarse en una mesa y dar explicaciones», argumentó García.

Desgaste y decepción

De manera oficial, ninguna de las dos federaciones reconoce que la desconvocatoria de la huelga se hará efectiva hoy, con independencia del resultado de la reunión con Industria, pero el cansancio de los trabajadores, tras dos meses sin cobrar su nómina, y la decepción tras los escasos resultados de la protesta es evidente. De hecho, ya el viernes el comité de empresa de los economatos de Hunosa acordó en asamblea que ayer regresarían al trabajo.Un hecho que finalmente no se produjo ante la presencia de piquetes que terminó disuadiendo a los trabajadores que a primera hora de la mañana acudieron a los centros de trabajo. El encierro que los mineros mantienen en la Diputación de León también podría llegar a su fin este miércoles.

En las últimas horas, los propios encerrados han asegurado que en la situación actual y con la mesa del carbón de nuevo convocada «aquí estamos de más». Sin embargo han advertido de que la decisión final no está tomada y que por el momento «nada se sabe oficialmente». El regreso al tajo de los mineros de Aragón, junto con el más que probable abandono del encierro en León, podría provocar una sucesión de acontecimientos en cadena que llevaría a retomar la actividad en el sector en los próximos días.