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Gran ambiente y mucha agua en el desfile por Santa Ana de Grado
Cientos de moscones tomaron las calles de la villa a manguerazos y calderos en una de las fiestas más populares del verano
El Desfile por Santa Ana de Grado no decepcionó a nadie este sábado. Con un gran ambiente y muchas ganas de folixa, cientos ... de moscones acudieron sin falta a una de sus fiestas más populares del verano en honor a Santiago y Santa Ana.
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Tras unos días de gran asistencia en cada una de las actividades organizadas por el Ayuntamiento, la Hermandad de Santiago y Santa Ana y algunos colectivos, el día grande no decepcionó.
El ambiente empezó a gestarse muy pronto, cerca de las nueve de la mañana, con música y bailes como espera previa a la salida de las carrozas y charangas del desfile. Familias enteras y grupos de amigos empezaron a reunirse en el centro de la villa, la mayoría de ellos con el tradicional pañuelo azul de la bandera de Asturias al cuello.
Durante varias horas, la gente esperó emocionada, acudiendo al parque de Arriba con sus pistolas de agua y calderos. El agua estuvo presente durante toda la mañana, mojando y salpicando a cualquier incauto.
A las diez horas, la comitiva salió desde la avenida de los Deportes, seguida de cientos de moscones, además de visitantes de todos los rincones de Asturias. Avanzó muy lentamente y durante más de dos horas recorrió sin prisa las calles de Grado hasta llegar al parque de Abajo, donde les recibió una multitud.
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Por el camino, tampoco hubo descanso para el agua, con vecinos soltando vasos y dando manguerazos al público desde las ventanas y terrazas.
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La fiesta no paró entonces y se alargó durante toda la tarde, con la sesión vermú en el parque de Arriba y la comida popular. Aunque algunos decidieron descansar un rato, otros siguieron moviéndose al ritmo del Grupo K Libre y las actuaciones de las charangas invitadas, el DJ Oliver Ronan y el Trío Saoco.
La verbena llegó de noche, a las 22 horas, para los que aún les quedaba ganas de fiesta. Dani Parrondo (The Goat), una de las voces más conocidas de la folixa asturiana, fue el encargado de revivir el ambiente durante unas horas más hasta los fuegos artificiales de la medianoche.
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Retomó el turno sobre el escenario en un segundo pase a las 00.30 horas seguido de una sesión DJ hasta bien entrada la madrugada. Así cerró el día grande de unas fiestas de Santiago y Santa Ana memorables para todos los moscones.
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