Langreo, Mieres y Castrillón concentran la mayor tasa de pobreza en Asturias

La desigualdad y la pobreza siguen siendo dos de los factores que más castigan a la sociedad española desde que estalló la crisis económica. Durante el pasado año, según datos de la Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF), la brecha salarial llegó a uno de sus puntos álgidos. En Asturias, Langreo, Mieres y Castrillón son los concejos que mayores tasas de pobreza concentran, al encontrarse la cuarta parte de su población por debajo del umbral de la pobreza, fijado en el 60% de la renta media de la región.

Ésta es una de las conclusiones del último informe elaborado por el Laboratorio de Análisis Económico Regional (RegioLab), un órgano dependiente de la Universidad de Oviedo dedicado al análisis de las desigualdades en renta y pobreza en Asturias. El estudio, elaborado a raíz del EPF y de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV), sitúan al Principado en el grupo de regiones donde la tasa de pobreza y los niveles de desigualdad son menores que la media nacional, si bien estos indicadores también han ido aumentando durante los años recientes.

Concretando en cifras, el observatorio apunta que el pasado año la tasa de pobreza se situó en Asturias en el 17,3%, frente a la media nacional, que asciende al 19,7%, si bien identifica importantes diferencias entre los distintos concejos. Así, la tasa de pobreza alcanza un promedio del 25,4% en el caso de Langreo, Mieres y Castrillón, mientras que se limita al 13,4% en Avilés y Siero, y al 14,8% en Gijón.

Oviedo, con un 19,4%, es el único gran municipio asturiano que supera la tasa media de pobreza de la región, mientras que en los concejos de entre 10.000 y 20.000 habitantes se sitúa en el 18,9 % y en los más pequeños, en el 15,5%.

El informe de RegioLab también revela que los mayores niveles de desigualdad en la renta de los hogares aparecen en los municipios de Oviedo, Avilés y Siero, mientras que en Gijón, los grandes municipios de las cuencas -Mieres y Langreo- y los municipios de carácter más rural la distribución de las rentas familiares parece más igualitaria.

En el caso de Oviedo, el estudio explica que la principal causa de su mayor desigualdad procede de la fuerte brecha entre la población con mayores ingresos frente a la de menores rentas. Así, el 10% con mayores ingresos en la capital asturiana disponía el pasado año de una renta que es 5,53 veces superior a la del 10% con menores rentas, la diferencia más abultada en Asturias. Sin embargo, precisa el estudio, las diferencias en Oviedo entre el 10% más rico y la media es una de las más bajas.

En Avilés y Siero ocurre lo contrario, ya que aunque la brecha entre los extremos es menor que en la media regional, la diferencia entre la población de mayor renta y la media de Asturias es una de las más abultadas. Las desigualdades en el resto de la región, incluyendo Gijón y las Cuencas, se sitúan claramente por debajo de la media española.

Otro aspecto que destaca el análisis es que las desigualdades son significativamente superiores en las ciudades. Es decir, los municipios más pequeños, con menos de 10.000 habitantes, son los más homogéneos en renta. En estos casos la renta del porcentaje de población de mayores ingresos apenas multiplica en 1,5 a la renta mediana.

El informe precisa que el análisis se basa en los datos de ingresos medidos en términos nominales y que, por tanto, no reflejan diferencias en el poder adquisitivo real entre las diferentes zonas estudiadas. «Estos niveles de pobreza de las principales ciudades, en especial de Oviedo, muy posiblemente se elevarían significativamente si considerásemos que es en estos lugares donde se suelen alcanzan costes de vida más elevados, con precios medios de bienes y servicios seguramente más altos que en el resto de la región», precisa el documento.