Activado el protocolo por sarna al aflorar nuevos casos en las escuelas e institutos de Asturias

En los meses previos a las vacaciones estivales «hubo muchísima sarna», constatan pediatras de la región. En algunas consultas de Atención Primaria se llegaron a tratar más de 200 casos en los primeros seis meses del año. Con el nuevo curso académico, han vuelto a aflorar las infestaciones por 'sarcoptes scabiei', un parásito que penetra en la piel horadando túneles y produce un picor generalizado muy intenso.

A día de hoy, «se han notificado casos de sarna en la mayoría de colegios e institutos de la región», afirman fuentes de la Consejería de Salud, que empiezan también a detectar escabiosis en las residencias geriátricas. «Puede presentarse en cualquier edad y nivel social, aunque es más frecuente en personas que tienen contacto estrecho, sobre todo, niños y ancianos que residen en instituciones», precisan las autoridades sanitarias del Principado, que, al igual que los médicos, insisten en despojar la sarna de los prejuicios asociados a este trastorno epidérmico.

«El problema reside en que la sarna es muy sibilina y, en su fase inicial puede pasar desapercibida incluso para los médicos. Así que, cuando empiezan a darse casos, lo adecuado es tomar medidas y llevar a cabo una vigilancia activa para que no se desmadre la situación», señalan pediatras de los centros de salud, que, de momento, se mantienen a la espera de ver cómo evolucionan los contagios detectados en colegios e institutos.

Los médicos desconocen el por qué de estos brotes repentinos y sucesivos de escabiosis, que se daba prácticamente por erradicada en humanos. «No sabemos exactamente los motivos. La gente puede pensar que la sarna se debe a falta de higiene o afecta a personas de una clase socioeconómica determinada. Pero no. Afecta a todo el mundo», inciden los facultativos.

La escabiosis se suele presentar inicialmente con «lesiones lineales con aspecto de surco plateado». Pero, en algunos casos, los primeros síntomas son inespecíficos e incluso puede ocurrir que una persona infestada por 'sarcoptes' no llegue a desarrollar ni los picores ni los eccemas característicos de la sarna, aunque sí la contagie. Ante un diagnóstico confirmado, el Principado plantea un tratamiento tanto curativo como preventivo.