La Fiscalía rebaja a doce años la petición de cárcel por la muerte de Fernández-Canteli
El Ministerio Fiscal considera que se trató de un homicidio y no de un asesinato como mantiene la acusación particular. La defensa pide la absolución
LUCÍA LÓPEZ PÉREZ
LA ARENA.
Jueves, 29 de febrero 2024, 01:00
Tres posibles futuros se presentan para D.R.D. acusado de matar a Alejandro Fernández-Canteli la noche del 4 de noviembre de 2020 en San Juan de La Arena. Así se extrajo de la tercera sesión del juicio, celebrada ayer en la Audiencia Provincial de Oviedo, en la que durante la mañana se presentaron las pruebas de los médicos forenses y los peritos que examinaron la casa en la que ocurrieron los hechos, el coche del fallecido y los restos biológicos en la víctima y el acusado, así como el teléfono de este último donde se analizaron las 18 llamadas que D.R.D. hizo a Fernández-Canteli antes y después de la agresión y las fotos y mensajes de audio que el acusado mandó a la víctima tras abandonar la casa. En estos mensajes, que fueron leídos textualmente por los peritos, D.R.D pedía perdón a Fernández-Canteli y le pedía que no le denunciase, aunque en los mensajes no constaba por qué.
Por la tarde, la Fiscalía y las partes emitieron sus conclusiones al jurado, que el viernes deliberará sobre el futuro de D.R.D.
La Fiscalía considera ahora que los hechos son constitutivos de un delito de homicidio y propone para el acusado doce años de prisión, cinco de libertad vigilada y la expulsión del país durante diez años una vez pase al tercer grado para concluir la pena. Por su parte, la acusación particular mantiene la pena de veinte años de prisión añadiendo que la víctima no pudo defenderse en el momento de los hechos. La defensa pide la libre absolución, pues considera que no hay pruebas concretas que demuestren que D.R.D. fue quien clavó el arma.
El acusado llamó hasta en 18 ocasiones a la víctima y le envió varios archivos de audio disculpándose tras la agresión
Según relata la Fiscalía el 4 de noviembre de 2020, el acusado (Rumanía, 1966) pidió a la víctima, con quien mantenía una relación sentimental desde hacía unos meses, que acudiera a su domicilio en San Juan de la Arena. Una vez allí, ambos accedieron juntos al dormitorio del acusado, ubicado en la planta de arriba de la vivienda. Tras una discusión entre ellos, el acusado bajó a la planta inferior. Allí, el acusado dio un violento golpe a un cuadro, causándose lesiones a sí mismo en las manos. En un momento dado, el acusado atacó al propietario de la vivienda, llegando a tirarlo al suelo tras darle dos puñetazos, momento en que intercedió el novio del agredido.
En ese momento Fernández-Canteli acudió a la estancia de la planta inferior y dio un golpe en la zona de la nariz al acusado. Una vez que la situación se tranquilizó, los testigos se marcharon a otra habitación de la casa. El acusado se dirigió a la puerta del salón, salió de la estancia, atravesó el patio, entró en la cocina en el exterior de la vivienda y cogió un cuchillo de unos diez centímetros de hoja y 1,6 centímetros aproximadamente de ancho. Después recorrió los 5,4 metros de vuelta hasta el lugar en el que se encontraba la víctima y, con ánimo de causarle la muerte, se lo clavó en el cuerpo, a la altura de la zona inferior de la clavícula, dirigiéndose el cuchillo hacia abajo, de modo que penetró en el tórax y perforó el pulmón, para terminar su trayectoria a nivel de la capa superficial de la arteria aorta ascendente, sin llegar a perforarla. El acusado manifestó: «Antes de que me mate a mí, como mataron a mi padre, lo mato yo, a este maricón». La víctima falleció sobre las 23,15 horas en el interior de su vehículo en la carretera en dirección Soto del Barco mientras se dirigía al hospital.
