El colapso del ingreso mínimo solo resta 532 beneficiarios en un año de la prestación regional

Sin embargo, el colapso en la gestión de esta renta básica, nacida para ser 'el escudo social contra la covid', pero que camina a trompicones por los cambios en la normativa y los retrasos del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), ha hecho que la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar solo haya restado 532 nóminas de salario social entre diciembre y abril por el paso de los beneficiarios de una ayuda a otra.

Un retraso que, además del perjuicio para los solicitantes, que percibirán mayor cuantía con el ingreso mínimo, ha generado un gasto extra no previsto en las arcas regionales. Calculaba el equipo de Melania Álvarez pasar de 21.110 nóminas de salario social en enero a 12.600 en diciembre. Sin embargo, los últimos datos, con fecha de ayer, indican que son 20.753 los asturianos que aún perciben el salario social.

En esa situación, pendientes de cruzar la pasarela de una prestación a otra, se encuentran 3.500 asturianos, cuyos expedientes están a la espera de revisión por el equipo extraordinario creado por la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar para acabar con el colapso del INSS.

A ellos se suman los 1.670 expedientes que ya han sido revisados y que han logrado cruzar la pasarela. El problema es que muchos reciben ahora el cobro retroactivo del ingreso mínimo vital, por lo que tendrán que devolver el salario social cobrado durante los meses en los que se les ha aprobado la cobertura estatal.