La Confederación hizo el 33% de lo marcado en el anterior programa

El informe de evaluación que se ha hecho del programa anterior descarta esas actuaciones que estaban en curso a la hora de hacer examen. Centra así el foco en las 257 obras que quedaban planificadas a futuro y que exigían 488 millones de parte de diversas administraciones. Aquel plan autonómico 2002-2013 confiaba a la Confederación Hidrográfica la suerte de 34 actuaciones que precisaban 213 millones. Eso era lo prometido. Lo que se llegó a ejecutar se queda en 70,8 millones, esto es, un 33%.

La inversión asumida por el Principado durante el mismo periodo asciende a 394,89 millones, indica el informe. Si se suma todo lo realizado por las administraciones central y regional, estuviera o no incluido en el plan inicial, resulta que el esfuerzo materializado para mejorar el saneamiento ha sido de 493,5 millones en una década.

Es decir, el plan 2020-2030 aspira de alguna manera a mantener el ritmo de inversión real precedente, pero lo hace en un contexto en el que han desaparecido algunas fuentes de financiación comunitaria que entonces sí estuvieron disponibles. De ahí en parte que se esté volviendo el foco a la contribución de los concejos y los propios ciudadanos.