Uno de cada diez tumores que se detectan en Asturias es de pulmón

El 10,3% de los tumores que se detectan en Asturias son de pulmón. O lo que es lo mismo: uno de cada diez enfermos se enfrenta a este tipo de cáncer, cuarto en tasa de incidencia -detrás del colorrectal, el de próstata y el de mama- y primero en letalidad. Unas cifras que los especialistas relacionan estrechamente con el consumo de tabaco y, según las últimas estadísticas, en Asturias hay un 19% de la población mayor de 15 años que fuma de forma habitual.

Estos datos cobran actualidad con motivo del acto celebrado ayer en la Junta General del Principado, en el marco de la 'Semana europea de la lucha contra el cáncer de pulmón'. Con este acto, se quiso «llevar la voz de los afectados al corazón parlamentario de la comunidad autónoma» y abrir una reflexión para que «todos los actores involucrados centremos nuestro esfuerzo en la prevención, el diagnóstico y la atención del cáncer pulmonar», señaló el presidente de la Junta.

Juan Cofiño confía en que iniciativas como ésta contribuyan a «dejar atrás el tabú, la actitud fatalista y el sobredimensionamiento del diagnóstico» de cáncer de pulmón. «Debemos comenzar a actuar con una mentalidad acorde con el desarrollo científico actual», alentó el presidente del Parlamento asturiano, convencido de que este tumor «dejará de ser una sentencia si apelamos a la prevención y detección temprana con la empatía y delicadeza que se merece».

También intervino en el acto María Ángeles Marín, miembro de la junta directiva de la Asociación Española de Afectados de Cáncer de Pulmón (Aeacap), que, a través de un manifiesto leído por el periodista Javier Cancho, plantea la necesidad de que las instituciones públicas adopten tres medidas: iniciar programas de detección precoz mediante el cribado de cáncer de pulmón con tomografías de baja dosis; aplicar el diagnóstico molecular y garantizar el acceso equitativo a los tratamientos innovadores autorizados por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), para que se aprueben también en España».

Marín abundaba en estas tres soluciones al inicio del encuentro, que estuvo arropado por representantes de los distintos grupos parlamentarios. «Los cribados de cáncer de pulmón son necesarios no por los enfermos, sino por los que no lo son», incidió. «En España se diagnostican 35.000 nuevos casos anuales y nos morimos 28.000. ¿Por qué? Porque no hay cribado», incidió.

En cuanto a la medicación más avanzada que ya ha recibido la autorización de la Agencia Europea, los enfermos se encuentran con que «en España tarda tres años en aprobarse». Pero, además, tanto Juan Cofiño como María Ángeles Marín pusieron el foco en el incremento de casos que se está detectando en personas que no son fumadores, especialmente «mujeres menores de 50 años». Circunstancia que explicaría el empeño de la Aeacap en que se desarrolle el diagnóstico molecular: «Hay que buscar las causas», sostiene Marín, que se encuentra en ese grupo de enfermos que no encajan en los patrones convencionales del cáncer pulmonar. Aun así, «el tabaco es el 80% de los cánceres de pulmón» y, por tanto, «hay que seguir machacando» con ese factor de riesgo.

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