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GLORIA POMARADA
Domingo, 17 de enero 2021, 21:09
Los puentes sobre el río Sella son en Arriondas y Ribadesella más que meras infraestructuras. Vía de entrada desde el Oriente en el caso ... de la capital parraguesa y nexo entre las dos márgenes de la ría en la riosellana, atesoran además una fuerte carga simbólica: la de ser salida y meta del Descenso Internacional del Sella. Desde hace más de una década, los vecinos de ambos concejos sueñan con el agosto en que sus puentes luzcan al fin una remodelación que, pese a los intentos, no termina de materializarse. A 2021, ambos puentes llegan sin embargo con una perspectiva favorable tras años de reivindicaciones, obras fallidas y complejas tramitaciones burocráticas.
La necesidad de reforma es común a ambos concejos, pero para llegar a la casilla de salida de las obras que ahora se plantean han seguido distintos caminos. En Ribadesella, las tareas dependerán del Gobierno central, que este ejercicio ha vuelto a incluir una partida en los Presupuestos Generales del Estado. Para la remodelación del viaducto, por el cual discurre la N-632, consignan un total de 5,3 millones, con una primera inversión de 2 millones para este mismo 2021. «Llevamos más de veinte años luchando y nunca estuvimos tan cerca, lo importante era que estuviese en los presupuestos para licitar la obra en 2021», destaca el alcalde, Ramón Canal (PSOE).
Las cuentas estatales ya incluyeron hace once años una partida para las obras, presupuestadas entonces en 2,5 millones. Esos trabajos, que nunca comenzaron, forman parte de una lista de proyectos fallidos para el puente, entre ellos la construcción de uno totalmente nuevo. La opción estuvo sobre la mesa en la primera década del presente siglo y la estimación del Ministerio de Fomento rondaba los 8,2 millones. En 2010, en mitad de la crisis económica, el plan quedaba descartado y situaba al puente en un único escenario posible, el de la reforma.
«Se juega la vida»
El actual proyecto de remodelación fue adjudicado en 2019 a la UTE integrada por Fhecor Ingenieros Consultores y Noega Ingenieros. El plan elaborado incluirá tanto una mejora estética y de la seguridad como la ampliación de la plataforma, que pasará de a ser de entre 12 y 13 metros, frente a los 8 actuales, explicó alcalde. «El puente tiene un uso bestial, sobre todo en verano, y la seguridad es muy importante, el peatón se está jugando la vida», recordó. Con ese incremento del tablero se produjo también la subida en los costes, que tras ser previstos inicialmente en 2,2 millones acabarán superando los 5.
En el puente Emilio Llamedo de Arriondas el proceso ha estado marcado por el cambio de titularidad de la infraestructura. Por ella pasa la N-634 y, ante la falta de proyectos por parte del Gobierno central para su reforma, el Principado solicitó en 2018 la cesión de ese tramo de carretera. Fomento accedió y de este modo será el Ejecutivo autonómico el que costee los trabajos, estimados en unos 800.000 euros. Por el momento, los presupuestos asturianos consignan para este ejercicio 300.000, cuantía ampliable en futuras cuentas.
Estudio de alternativas
Al igual que en el puente riosellano, el Emilio Llamedo tiene a sus espaldas una larga trayectoria de planes sin cumplir y fechas para el inicio de las obras nunca hechas realidad. El plan general de ordenación (PGO) anulado en 2009 llegó a aludir a la sustitución de la estructura mediante un «diseño emblemático de ingeniería moderna», estimado en cuatro millones de euros. La remodelación de lo existente acabó imponiéndose como alternativa más viable.
El Ayuntamiento dispone incluso de un anteproyecto que contempla la instalación de balcones en voladizo con vistas sobre el Sella, nuevas barandillas, luminarias y ampliación tanto de los carriles para vehículos como de las aceras. Desde el Principado optaron no obstante por encargar en marzo del pasado año un estudio más amplio, centrado en cuestiones de seguridad y llamado a definir la alternativa de obra más viable para la estructura. La pandemia se cruzó en el camino de la burocracia y el proceso de licitación se «dilató más de lo previsto», explica el alcalde, Emilio García Longo. Ese estudio se encuentra ahora en su fase final y, una vez listo, el regidor confía en que llegue el momento de licitar las ansiadas obras. «Estamos en la recta final de una demanda histórica y en 2021 por fin comenzarán los trabajos», indica.
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