Los afines a Mallada suspenden su encuentro en Ribadesella tras la polémica surgida

La convocatoria informal a las juntas locales -vía llamadas telefónicas y mensajes de WhatsApp en la tarde del jueves- de la presencia este viernes de Teresa Mallada en el Gran Hotel del Sella, en Ribadesella, no hizo más que echar leña al fuego. Se explicaba que era para informar «de todo lo acontecido durante estos días», al tiempo que se pedía «máxima difusión al tema para así y de primera mano nos enteremos de lo sucedido». El sector crítico vio este encuentro como una estrategia para iniciar una movilización interna o, al menos, ofrecer un baño de multitudes en Ribadesella, cuya junta local es una de las más afines a Mallada, si bien la llamada a participar en el acto también fue trasladada a dirigentes y militantes de otros concejos.

El revuelo interno fue tal que, esta misma mañana, los 'malladistas' suspendían el acto. En mensajes por escrito se ha justificado la decisión por «motivos de agenda» e, incluso, se avanza de que «se irá informando en actos sucesiones«. Sin embargo, según ha podido saber EL COMERCIO, se ha trasladado también que la anulación del acto obedece a que se han recibido presiones internas, si bien defienden que Mallada cuenta con el visto bueno de Génova para «mantener su actividad con normalidad». El gabinete de prensa de Teresa Mallada niega que hubiera existido nunca tal previsión de agenda, y es cierto que en ningún momento se convocó el encuentro como acto oficial.

El sector crítico enmarca esta convocatoria en una estrategia del equipo de Mallada para seguir controlando el partido hasta el final e, incluso, tratar de torpedear un futuro congreso. Igual que los movimientos que el equipo de Teresa Mallada ya ha dado para que Pablo Álvarez-Pire sea el próximo portavoz del grupo parlamentario. De ahí que pidan a Génova que intervenga cuanto antes el partido para evitar este tipo de situaciones.