La sanidad pública asturiana se pone en pie de guerra: «Queremos unas condiciones laborales de este siglo»
Decenas de trabajadores se sumaron a la concentración convocada por CSIF, Satse, UGT y CCOO delante del HUCA para reclamar la jubilación anticipada y parcial, una reclasificación profesional y mejoras en la jornada. «El personal está agotado», denuncian. Los sindicatos amenazan con una huelga general si el Ministerio no recoge sus reivindicaciones en el nuevo Estatuto Marco
«Queremos unas condiciones laborales de este siglo». Los trabajadores de la sanidad asturiana han decidido plantarse contra la reforma del Estatuto Marco que propone el Ministerio de Mónica García y hoy daban visibilidad a su malestar con una concentración delante del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Tres son sus principales reivindicaciones: una nueva clasificación profesional retribuida, jubilación anticipada y parcial y una mejora de la jornada laboral, ahora marcada por la existencia de «plantillas infradotadas, con profesionales sobrecargados».
A estas tres cuestiones hacían referencia las pancartas desplegadas durante el acto de protesta, que será «el primero de muchos», si el Ministerio de Sanidad sigue sin escuchar sus peticiones. Los sindicatos convocantes -CSIF, Satse, UGT y CCO- no descartan organizar paros parciales o incluso una huelga general. «No vamos a retroceder ni un palmo. Estamos ante un proceso crucial, histórico, y no podemos dejar pasar la oportunidad de que se aborde realmente la problemática del personal sanitario», coincidían sus portavoces.
A la concentración se sumaron decenas de trabajadores y otras tres organizaciones sindicales del sector sanitario: Sicepa-Usipa, SAE y CSI. No secundaron la protesta, sin embargo, ni el Sindicato Médico Profesional (Simpa) ni la Plataforma de Médicos del Servicio de Salud del Principado, que aspiran a un Estatuto Marco específico para facultativos y libran su propia batalla contra el Ministerio.
«Tenemos más cosas en común de las que nos separan. Tenemos que unir fuerzas. Fraccionar el Estatuto Marco supondría una merma para los trabajadores. ¿Por qué? Por el clásico divide y vencerás», exponía esta mañana Adrián Redondo, en nombre de CCOO. Algo en lo que abundaba Felipe Piedra, de CSIF: «Defendemos un Estatuto Marco único, en el que entren todas las categorías. El Ministerio quiere dar carpetazo a la negociación y tirar para adelante, pero, si hace falta, iremos a una huelga general».
«Daremos caña»
Tal como recordaba María Belén García, al frente del Sindicato de Enfermería (Satse), «llevamos tres años en una mesa de negociación intentando reformar una ley que tiene más de 20 años y ahora el Ministerio quiere acabar con las reuniones pactadas, cuando hay muchas cosas que cambiar para mejorar las condiciones de todo el personal y la sostenibilidad del sistema de salud».
Por ejemplo: «Tenemos claro que hay que mejorar la jornada laboral. La plantilla está agotada», apuntaba desde UGT Tatiana Soto, que también hizo hincapié en «la necesidad de una reclasificación profesional, que se adapte a la titulación exigida» y, por tanto, se remunere «adecuadamente». A día de hoy, «el Gobierno central le lanza la pelota a las comunidades». En el caso concreto de Asturias, «esperamos que la consejera de Salud interceda para que se reconozcan nuestras peticiones», que incluyen, además, el derecho a la jubilación parcial con «cobertura inmediata» y anticipada «sin penalizaciones».
La cuestión es que los ánimos están que arden en la sanidad pública asturiana, que intensifica su capacidad de presión y anuncia que «daremos caña. No estamos pidiendo privilegios, estamos reclamando derechos». El nuevo Estatuto Marco que plantea Mónica García (Sumar) ha puesto en pie de guerra a los sanitarios de todo el país. Este documento establece las condiciones laborales de todo el personal estatutario del Sistema Nacional de Salud y «las mejoras previstas son mínimas».