Ciudadanos agranda su brecha interna con la dimisión del secretario de Organización en Asturias

Ciudadanos está a un paso de la ruptura definitiva, tras la dimisión del secretario de Organización de la formación en Asturias. Sergio García ha presentado esta mañana en la sede del partido su renuncia a este cargo —mantiene su acta de diputado adscrito a Cs— por no compartir la hoja de ruta «equivocada» de la dirección nacional para afrontar las elecciones autonómicas y locales del próximo y, sobre todo, por las «difamaciones» hacia su persona que asegura haber recibido este fin de semana del secretario de Organización nacional, Carlos Pérez-Nievas.

Este movimiento es un paso más en el proceso de crisis interna que vive el partido, tras la plataforma creada —y liderada desde Asturias— para revocar a Inés Arrimadas al frente de Ciudadanos y toda su ejecutiva. Sergio García es uno de los portavoces de esta plataforma, que se denomina Somos Cs, por lo que su renuncia confirma que la situación interna del partido ha llegado a un punto sin retorno y que esta brecha amenaza con ser la puntilla definitiva a un proyecto político agotado, como dicen las encuestas y los resultados en las últimas convocatorias electorales, donde Cs ha desaparecido o ha quedado a la mínima expresión.

Sergio García argumentó su decisión en dos aspectos fundamentales. Por un lado, porque no está de acuerdo con la hoja de ruta definida por la dirección nacional del partido respecto a la preparación del partido para las próximas elecciones. Cabe recordar que Inés Arrimadas anunció hace unas semanas la refundación del partido, del que apenas ha trascendido nada aún de las líneas en las que se está trabajando. El ya ex secretario de Organización de Cs en Asturias dijo ayer que no comparte este calendario, «porque como muy pronto en enero o febrero se empezaría a hablar» de composición de listas. «No puedo seguir los edictos de la dirección», recalcó.

Pero, fundamentalmente, la principal causa que le ha llevado a presentar la renuncia tuvo lugar este fin de semana, durante una visita a Asturias de Carlos Pérez-Nievas, el número dos del partido a nivel nacional. El dirigente mantuvo encuentros con varios dirigentes regionales y locales de Cs y en esas reuniones «vertió acusaciones falsas sin contrastar y difamaciones contra mi que no puedo tolerar», dijo Sergio García. «Está claro que no tengo la confianza de mi secretario de Organización y por coherencia no puedo seguir ocupando cargos orgánicos en el partido», recalcó.

Sergio García desliga su decisión del hecho de que él sea uno de los cargos que lidera la revuelta contra la dirección nacional de Ciudadanos. «Son cuestiones ajenas que nada tienen que ver. Me voy porque a diferencia del resto de partidos no nos estamos armando políticamente», dijo el ex secretario de Organización de la formación naranja en Asturias.

Sí quiso dejar claro García su compromiso con Ciudadanos, un partido «al que lo he dado todo y seguiré dándolo» desde su posición de diputado regional. De esta forma, descarta que pueda ser expulsado del grupo, puesto que no ha renunciado a su militancia de Cs y el trabajo con sus compañeros, desde el inicio, es cordial.

Afirma Sergio García que una vez que comunicó al líder de Cs en Asturias, Nacho Cuesta, y al resto de miembros de la ejecutiva regional ha recibido mensajes de agradecimiento por el trabajo realizado. También quiso echar un capote al coordinador autonómico, silente desde hace semanas respecto a la crisis interna que vive el partido. Ni siquiera ha salido a desmentir algunas declaraciones realizadas por otros cargos del partido que le sitúan ya en la lista del PP en Oviedo de cara a las próximas elecciones. «Nacho hace el papel de coordinador autonómico, que no es otro que el de tratar de solucionar los problemas que surgen. Está actuando de forma acorde a su cargo», dijo Sergio García.

Queda ahora la incógnita de saber quién relevará a Sergio García en el cargo de secretario de Organización. De momento hay silencio absoluto al respecto, aunque algunos cargos de Ciudadanos consultados apuntan a Luis Pacho como el mejor situado para desempeñar estas funciones.

Independientientemente de la recomposición orgánica de Ciudadanos en Asturias tras la dimisión de Sergio García, lo cierto es que la fractura en este partido afecta ya a los cimientos de la propia organización. Cabe recordar que por las mismas críticas que hace ahora Sergio García hacia la dirección nacional fue expulsado este verano del partido Armando Fernández Bartolomé, ahora en el grupo mixto. Precisamente Sergio García tiene todas las papeletas de suplir a Fernández Bartolomé en la Mesa de la Junta General, donde el diputado expulsado ocupaba el cargo de secretario segundo.

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