«Merece el Premio Nacional de Poesía»

Tan sólo faltó 'Musina', la siamesa que acompaña a Luis Miguel Rabanal en su refugio de la plaza de El Vaticano y que ayer, de manera excepcional, rompió para participar en la presentación en su Avilés adoptivo de 'Este cuento se ha acabado', el volumen donde la editorial Renacimiento recopila los 22 poemarios escritos desde 1977 y que han convertido la voz de un prometedor poeta leonés en una de las referencias de la poesía española actual.

La asistencia de Luis Miguel Rabanal concedió al acto organizado por el Aula de Cultura de LA VOZ DE AVILÉS, coordinada por Armando Arias y patrocinada por Cafés Toscaf, un aire de excepcionalidad y que permitió subrayar el don de la amistad que se genera en torno al poeta. Rafael Saravia y Alberto Torices son los promotores de la edición de un libro que no representa un punto y final, sino la continuación de una obra tan prolífica como exigente, como explicó Saravia, que no dudó en reclamar la concesión del Premio Nacional de Poesía para el autor aprovechando la publicación en una editorial de prestigio como Renacimiento.

Alberto Torices desgranó los dos años de trabajo en la edición y preparación de un volumen donde fue necesario teclear varios ejemplares que no se encontraban en soporte digital. El aliento de Antonio Gamoneda impulsó una publicación que, al contrario de lo habitual, recoge los libros desde el más reciente a los primeros versos del poeta, una indicación de Rabanal. «Permite una nueva lectura», aseguró Torices.

El poeta leonés Antonio Merayo destacó el compromiso de Luis Miguel Rabanal con la poesía y la propia evolución de su escritura hacia una mayor contención verbal.

Por su parte, José Luis García Martín desveló las rencillas literarias hacia la corriente de la poesía de la experiencia, donde la editorial Renacimiento es uno de sus estandartes. «La presencia de Luis Miguel, que pertenecía al otro bando en Renacimiento significa que esta guerra ha terminado», declaró antes de definirle como un poeta total y leer tres poemas de su inédito 'Postales de ciudad pequeña', donde se inspira en Avilés.

La poeta María José Romero cerró el acto leyendo el epílogo del libro. Un texto breve y de una gran hondura. En él presenta el hecho de escribir en Rabanal y cómo la tecnología le ha abierto el mundo.