Un túnido de 197 kilos

Verdadera expectación despertó en la rula la captura realizada por un barco de pesca profesional, un túnido de unos tres metros de longitud que alcanzó en la báscula 197 kilos de peso. Una vez bajado a tierra mediante una grúa se comprobó que no cabía en la cinta transportadora, por lo que no pudo trasladarse a la cancha. La subasta se celebró entonces de forma no presencial, y la puja la ganó un mayorista que comercializa fuera de Avilés.

La captura se produce cuando la costera del bonito entra en su recta final, la época en la que habitualmente se pescan los ejemplares de mayor tamaño. Aunque la mayoría de los grandes barcos ya han dado por finalizada la campaña ante el escaso volumen de capturas, el bonito continúa llegando a Avilés. Las embarcaciones de menor tamaño aprovechan su cercanía a la costa para seguir pescándolo, y tampoco se descartan nuevas descargas de envergadura.

El pasado lunes el Berritz Amatxo, el Mundaka y el Esmeralda Tercero desembarcaron un total de 42.000 kilos, prácticamente la tercera parte de todo lo subastado a lo largo de agosto, tan solo 133.195 kilos, 99.948 menos que en el mismo mes del año pasado.