Acciona asumirá el coste del acondicionamiento portuario y el desvío de carreteras en El Estrellín

Conocedor, por experiencia, de lo tediosa que puede ser la tramitación burocrática de una de las piezas del plan de expansión de la Autoridad Portuaria, su presidente y exalcalde de Avilés, Santiago Rodríguez Vega, intenta agilizar al máximo las etapas que hay que quemar. Lo primero ha sido tener un documento, una especie de borrador del convenio que deben firmar los implicados. Y lo segundo, empezar a involucrar al Ayuntamiento de Avilés en una necesaria modificación del Plan General de Ordenación Urbana en la zona, y al Principado en todo lo que concierne a la tramitación ambiental de la operación, además de la parte que le toca a la Dirección General de Carreteras en el desvío de las dos vías de tráfico intenso a las que afecta la que será nueva zona logística del puerto.

Ayer le tocó el turno a la parte medioambiental, con una reunión en la que participó la viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático, Nieves Roqueñí, junto al presidente de la Autoridad Portuaria de Avilés, Santiago Rodríguez Vega, al director del Puerto, Ramón Muñoz-Calero, y a la jefa de Infraestructuras del Puerto, Olga Sánchez. En el encuentro abordaron la tramitación ambiental necesaria para las actuaciones previstas en la margen derecha de la ría avilesina, en el marco de su plan de expansión, y que implicará la ampliación de los terrenos dedicados a actividades portuarias.

La Autoridad Portuaria de Avilés es consciente de que los trámites que dependen de las administraciones públicas conllevan unos plazos que no se pueden saltar y que suelen dilatarse en el tiempo. El cálculo es que los mismos empiecen a correr cuando se firme el convenio, aproximadamente dentro de dos o tres meses. A partir de ahí, hay cuestiones como la modificación del PGOU de Avilés o la tramitación ambiental ante el Principado que podrían tardar entre veinte y veinticuatro meses.

Por esa razón, incluso antes de firmar el convenio, desde la dirección del puerto avilesino se trabaja en adelantar soluciones técnicas para disponer cuanto antes de aproximadamente 80.000 metros cuadrados de suelo logístico en El Estrellín. La premisa más importante para 'activar' la parte política del asunto es que será la empresa Acciona quien costee toda actuación, según se recoge en el borrador de convenio.

Hay que tener en cuenta que los suelos que se anexionarán al puerto en la margen derecha de la ría ya han sido explotados como cantera por Acciona, luego ya es ha sacado todo el rendimiento. Pero su beneficio también será a futuro, ya que con la reordenación de la actividad y de las carreteras que transitan por la zona, la empresa seguirá obteniendo beneficio con la explotación como cantera de 67.924 metros cuadrados, que posteriormente serán rellenados mediante la ampliación del convenio de Acciona con la multinacional Asturiana de Zinc para enterrar jarofix.

Además de con el Ayuntamiento también se trabaja en los proyectos del desvío de carreteras con el Gobierno del Principado. La anexión de los terrenos de la cantera de El Estrellín a la zona portuaria de la margen derecha supone una reordenación integral del tráfico en las carreteras de titularidad regional que unen Avilés con el faro (AS-329) y con el Cabo Peñas a través de Gozón (AS-328).

En ese sentido, ambas carreteras cambiarán de forma radical su trazado a la altura de El Estrellín. En primer lugar, la AS-328 que actualmente transita por detrás de la antigua Alcoa y que bordea el vertedero que utiliza AZSA para enterrar el jarofix desaparecería con el nuevo dibujo de la zona. Es decir, ese tramo sería explotado para seguir depositando los restos de la actividad de la multinacional del zinc, y sería sustituido por otro que se bifurcaría de la carretera AS-329 más adelante y transcurriría por un lateral de Alcoa-Alu Ibérica bordeando el vertedero de jarofix para volver a conectar con la actual carretera antes de la 'torre del difuntín', ya en Gozón.

Pero la carretera del faro de Avilés (AS-328) también sufriría modificaciones, porque la Autoridad Portuaria no quiere que su zona logística quede partida en dos, con vehículos de todo tipo circulando y problemas para conectar el nuevo suelo portuario con la zona de atraques de los muelles en la margen derecha. Por ese motivo, el actual trazado se desplazaría hacia el talud y bordearía por el Este toda la zona logística, que quedaría así conectada en una sola explanada.

Es en este punto, el del traslado de las carreteras para ir ganando tiempo y terrenos mientras se tramita la modificación del PGOU y los permisos ambientales, en el que trabaja el Puerto. Si todo marcha según el calendario previsto, a lo largo de 2023 se podría comenzar con las obras de cambio de trazado de las dos carreteras, lo que permitirá ya empezar reordenar los espacios y poner a disposición de las empresas que operan en la margen derecha más suelo para el acopio de mercancías y el acabado de piezas, si así lo demandan.