Las Arobias podría quedarse sin vigilancia por desavenencias entre los empresarios

El polígono de Las Arobias, situado en la margen izquierda de la ría de Avilés, aglutina a más de un centenar de empresas, de pequeño, mediano y gran tamaño, repartidas en otras tantas naves. Su diversidad se traslada también a sus modelos de negocio. Esto ha llevado a que el servicio de seguridad nocturna pueda desaparecer, dejándoles sin seguridad durante las noches.

Hace tres décadas, la Cámara de Comercio de Avilés intermedió entre todas ellas para poner en marcha este servicio ante la inseguridad que se daba en las calles del polígono, con robos, daños y otros incidentes varios. Además, de vigilar el polígono de Las Arobias, revisan cada noche las naves de la Travesía de la Industria, ubicadas junto a la rula, y también las ubicadas en la avenida de Lugo. Desde entonces, los beneficiarios aseguran que el equipo de vigilantes ha trabajado «muy bien» e incluso reconocen que «de un tiempo para aquí han bajado los incidentes», explica Francisco Noguera, presidente de la Asociación de Empresarios de la Margen Izquierda (AMIRA).

La entidad, fundada en septiembre de 2010, está formada por más de una treintena de empresas de las asentadas en esa margen de la ría, representando a poco más de un 30% de todas las implantadas en la zona. El contrato de seguridad y vigilancia no depende de ellos, sino de cada una de las empresas que han querido adherirse a él. Y ahí radica el problema. Hasta ahora Prosetecnisa es la encargada de prestar la vigilancia nocturna. Lo hace de nueve de la noche a ocho de la mañana y cuenta con una plantilla de tres vigilantes que hacen rondas por todo el polígono.

La entidad ha hecho oficial su interés en cesar con el servicio prestado. El motivo, que muchas de las empresas han ido rescindiendo su contrato con ella por lo que el volumen actual de aquellos negocios que pagan es muy bajo y no le compensa. De hecho, las que abonan este pago para cubrir los gastos de vigilancia suman entre veinte y treinta. Hasta ahora Prosetecnisa había mantenido sin cambios el servicio, vigilando todo el polígono de todas formas, aunque las llamadas de alarmas se respondían solo en aquellas que abonaban sus servicios.

Desde AMIRA han comenzado a barajar las opciones con las que cuentan, ya que a finales de este mes podría finalizar la vigilancia nocturna. «No queremos quedarnos sin seguridad por las noches y ya estamos buscando otra empresa que pueda estar interesada», recalcó Francisco Noguera, que confesó que no está siendo una tarea fácil, ya que «se necesita un número mínimo de empresas que se adhieran, y no lo hay, para que una empresa de este tipo le interese prestar vigilancia en esa zona de manera diaria», recalcó el presidente de la asociación empresarial.

No es el único que ha comenzado a moverse para evitar esa desprotección de la margen izquierda de la ría. Antonio Sabino, responsable de Eleksa, ubicada en la avenida Conde de Guadalhorce, beneficiario de este servicio, y expresidente de la Cámara de Comercio cuando este se puso en marcha el servicio, también busca una alternativa. «Hace 30 años ya vimos que era una necesidad que este polígono y alrededores contara con seguridad y ahora no puede quedarse sin ella. Ha llegado una carta explicando que la empresa dejará sus servicios y por eso lo primero que he hecho ha sido llamar a la Cámara de Comercio de Avilés para ponerles en aviso, igual ellos pueden ayudar», recalcó Sabino.

Tanto Noguera como Sabino saben que no es sencillo poner de acuerdo a las empresas que conforman esta zona. «No todas las que pagan la seguridad están dentro de AMIRA, solo hacemos de intermediarios, y no se puede obligar a nadie a este gasto», comentó Francisco Noguera, que sigue intentando que «haya un reemplazo porque es necesario aunque si que es cierto que los últimos años es una zona mucho más segura. También casi todos tenemos instaladas alarmas».

A la falta de este servicio se suma, además, que hace tres meses se suprimió la vigilancia en la terminal de contenedores de La Maruca. Con lo que esta extensa zona empresarial y portuaria de la margen izquierda de la ría podría ver mermada notablemente la seguridad de confirmarse que una nueva empresa del sector no se hará cargo de este servicio.

En estos momentos son tres las personas que ejercen de vigilantes en toda esta zona de Las Arobias y el resto de naves empresariales de la margen izquierda. A ellos también les ha llegado la comunicación de la empresa del cese de actividad, pero nada saben de su futuro laboral más inmediato. Cuentan con entre veinticinco y treinta años de antigüedad.

Por ellos se ha preocupado Antonio Sabino, «hay que mirar si se les podría subrogar. Son personas formadas, que saben del tema y conocen mucho la zona. Durante todo este tiempo han hecho muy bien su trabajo», recalcó.

El polígono podría quedarse este verano sin seguridad por eso el objetivo ahora es «encontrar una solución pronto, antes de que Prosetecnisa ejecute su cese de la actividad, de manera que cuando eso pase ya haya una nueva empresa prestando sus servicios y no quedarnos ni un solo día sin vigilantes nocturnos en las calles», puntualizó Sabino.