«La asociación se creó cuando la mujer no podía hacer nada, somos muy modernas»

-¿Cuándo asumió la presidencia por primera vez? ¿Había estado antes en la junta directiva?

-El mismo año en el que me apunté, en 2013, a los pocos meses entré como vocal de la junta gestora de la que había cogido las riendas Olga Rodríguez. En septiembre me preguntaron si podía ayudar y, a pesar de que tenía algunas obligaciones personales que no me permitían una dedicación completa, me convencieron y empecé a participar.

-En 2017 se estrenó como presidenta. ¿Por qué dio el paso?

-Porque Olga no quiso seguir y nadie se animaba a ponerse al frente. Yo me lo pasaba muy bien con la gente y no quería que la asociación se disolviera. Es cierto que es mucho trabajo, pero lo disfruto tanto que me animé.

-Pero ahora ya está cansada. ¿No?

-No es exactamente que esté cansada, pero para cuando termine en este mandato tendré 70 años y estaré en la recta final. Si la próxima junta necesita ayuda, yo voy a estar ahí, pero no al frente porque quiero disfrutar sin responsabilidad. No solo yo, el resto de mi equipo también piensa igual.

-¿Cuál es exactamente el trabajo de la presidenta?

-Estar pendiente de todo. Ahora todo se hace por ordenador y cualquier papelín que haya que tramitar con el Ayuntamiento se tiene que hacer a través de la sede electrónica. Para eso tienes que aprender y reciclarte. Yo también llevo la página de Facebook, en la que colgamos nuestras actividades. Aunque para los grandes viajes contamos con agencia, hay que tratar con ella lo que queremos y mirar los presupuestos. Estamos un día en la sede para que las socias se puedan inscribir en las excursiones, pero luego estamos todo el día al teléfono. La junta directiva tiene un grupo de WhatsApp en el que se habla a diario sobre cosas de la asociación o altas y bajas en las actividades de las socias.

-¿Cómo deciden los viajes?

-Yo los pienso, los propongo y se votan. A mí siempre me gustó mucho viajar y hacer excursiones, así que estoy en mi salsa. Es trabajo pero me gusta.

-A su junta directiva le sigue faltado una vocal ¿Por qué a una asociación tan numerosa (alrededor de 400 socias) le ocurre esto?

-Tenemos el papel de cada cargo muy definido y nos vendría bien otra vocal que nos ayudara. Pero hace falta comprometerse con estar un día a la semana en la sede de la plaza de Santiago López y el resto trabajamos desde casa.

-¿Se resintió el número de socias después de la pandemia?

-Hubo un antes y después. Se notó en la asistencia a conferencias y en excursiones, les costó trabajo empezar. Lo entiendo, la verdad. Ahora parece que ya se está normalizando.

-¿Cree que el cambio de modelo de sociedad está llamado a hacer desaparecer la asociación o, al menos, a cambiar de nombre?

-La asociación se creó hace 55 años cuando la mujer no podía hacer nada y parece que queda ese lastre en el nombre, pero en absoluto. ¡Somos muy modernas!

-¿Cuáles son las actividades habituales? ¿Y las más demandadas?

-Tenemos conferencias muy buenas y son tradicionales nuestras cenas de Navidad y la de Comadres, en la que nos disfrazamos. Somos muy animadas.

-Y conceptos tan de moda como el de sororidad, ustedes lo tienen ampliamente superado.

-En esta asociación siempre se ha integrado a todas. Todas somos iguales y entre nosotras hay mucha empatía.

-¿Cómo se sufragan: cuál es la cuota de las socias y cuál la aportación municipal?

-Tenemos una cuota 15 euros al año. Y al Ayuntamiento nunca le habíamos solicitado subvención porque nos cedía la sede y tampoco teníamos muchos gastos. Hace poco empezamos a pensarlo, pero con las vueltas que hay que dar para pedirlo y justificarlo casi nos daban ganas de renunciar a ella. Pero la vamos a pedir y aprovechar para traer a conferenciantes. Generalmente son muy generosos y vienen sin cobrar.

-¿Cómo es la relación con el Ayuntamiento?

-Muy buena. Cuando pasó a ser responsabilidad de esta asociación hacer los actos nos ayudaron desde Participación Ciudadana y la alcaldesa siempre viene a nuestro inicio de curso.

-Explíqueme eso del acta...

-Sí, antiguamente la asociación era una delegación de la provincial. Dependíamos de la de Oviedo. En 2019 todas las delegaciones nos hicimos asociaciones porque la ley así lo exigía. La de Oviedo cerró y la de Gijón hace años que desapareció.