Rafael Santandreu: «Hay una explosión de miedo. Los psicólogos tenemos el doble de trabajo»
Rafael Santandreu, Psicólogo y autor del libro 'Sin miedo' ·
Recomienda «mejorar la inteligencia emocional cuando las cosas van bien porque adversidades como la pandemia acaban llegando»En su primera y última visita al Aula de Cultura de LA VOZ DE AVILÉS en 2019 llenó la sala. Un público ávido de lecciones llenas de sentido común esperaba a uno de los psicólogos más conocidos del país y autor de libros de éxito. El catalán Rafael Santandreu presenta hoy, a las 19 horas, en el hotel Palacio de Avilés, su último trabajo, 'Sin miedo'.
-¿Cuáles son los miedos más habituales?
-Son los más absurdos. Por ejemplo, el miedo a hablar en público. O el miedo a cambiar de trabajo o pareja. Y son absurdos porque ahí no puede suceder nada grave. No se te va caer un brazo o perder la vida. Pero en este libro, trato de los miedos agudos, que son los peores. Se trata del miedo al miedo. Los ataques de pánico y el TOC. Son los peores porque se retroalimentan, crean círculos viciosos, espirales y te vuelven loco en minutos.
-¿Son racionales? ¿Cómo se puede reaccionar?
-Los miedos agudos no te dan la opción a razonar con ellos porque son avasalladores. Te invaden y no puedes pensar con claridad. Hay que traspasarlos. Exponerse a ellos y punto. Una y otra vez.
-¿Qué es el TOC?
-El trastorno obsesivo es cogerle miedo a un pensamiento y entrar en bucle. El más habitual: «¿Me habré contagiado al tocar esto?» O: «¿Seré capaz de suicidarme?» O: «¿Estoy desenamorado de mi pareja?». La persona entra en bucle y no puede dilucidar una solución. Está el 70 u 80% del día preocupado con eso. Cada día durante años. Lo tiene una de cada cincuenta personas.
-¿Y los ataques de pánico?
-Es cogerle miedo a una sensación corporal. Por ejemplo, que el corazón te vaya demasiado deprisa, que te dé un vértigo muy fuerte o al propio miedo. El problema es que el miedo a cosas internas se retroalimenta: el corazón empieza a acelerarse, te pones nervioso y se acelera más. Y tú te pones más nervioso. Así hasta el infinito.
-¿Hay más miedo a raíz del coronavirus?
-Hay una explosión de miedo. Los psicólogos tenemos el doble de trabajo. Para las personas en forma emocional, no ha sido nada. Para los que no estaban bien, ha sido demoledor. La moraleja es que hay que mejorar la inteligencia emocional cuando todo va bien porque las adversidades llegarán.
-¿Llega a ser limitante el miedo?
-Las personas que tienen ataques de pánico suelen encerrarse en casa porque temen tanto al ataque que prefieren quedarse en su lugar de protección. Suelen evitar coger el metro, el tren y el avión. Bares, discotecas y restaurantes son lugares prohibidos. En muchos casos, dejan de trabajar. Conozco un caso que se quedaba todo el día sentado en la esquina de un sofá, sin atreverse a ir solo siquiera al lavabo.
-¿Se puede corregir siempre?
-En la mayoría de los casos sí. En mi libro relato el caso de María José, que tuvo ataques de ansiedad diarios durante treinta años. Tomaba siete ansiolíticos al día. Tardó tres años en curarse del todo. Han pasado siete años de aquello y ha tenido muchas adversidades, entre ellas su divorcio. Pero nunca más le ha dado un ataque.
-¿Era necesario que la psicología ocupase el lugar que ahora tiene debido al coronavirus?
-No hay mal que por bien no venga. Y, es cierto, que se ha dado un paso en este sentido. La gente más inteligente no duda en aprender inteligencia emocional para ser más feliz y efectivo. Tener prejuicios sobre ello, solo te va a perjudicar a ti.
-¿Las consultas por videoconferencia son igual de efectivas?
-Sí. Estamos muy contentos con este sistema porque puedes ayudar a personas que viven lejos. El 95% del cambio en una terapia está en el esfuerzo del cliente. Su trabajo entre sesiones.
-¿Y un libro?
-Eso lo puedo asegurar. Yo recibo cada día un montón de mensajes de gente que han superado el TOC o la ansiedad siguiendo mi libro. Algunos se ofrecen a ser testimonios y grabamos una conversación en vídeo que estoy colgando en mi canal de YouTube. Ya llevamos casi sesenta testimonios maravillosos como los de María José.
-¿Ha desplazado la novela histórica en las estanterías de las librerías?
-Le hemos quitado un poquito de espacio, pero vale la pena. Porque un buen libro de psicología (hay muy pocos) te puede transformar completamente.