Garabaya se agiganta en los banquillos

En este sentido, ya ha dado un primer paso. La semana pasada obtuvo su primer logro como técnico con la conquista de la Copa de África en Marruecos. Lo hizo con la Selección Egipcia, en la que forma tándem con el que también fuera internacional Roberto García Parrondo. El equipo norteafricano venció en la final a Cabo Verde (37-25). El avilesino pone de relieve que la clave del triunfo final para hacerse con el cetro continental estuvo en «la victoria que conseguimos ante Túnez en semifinales (29-27)». Garabaya, tras su etapa como ayudante de Miguel Velasco en La Rioja de la Liga Asobal, inició su carrera como técnico con el equipo femenino de China, en el que solo estuvo tres meses, y luego se incorporó a la Selección de Egipto gracias a que el gijonés Toño Cartón no pudo continuar por motivos laborales.

«Me incorporé en diciembre porque Roberto entrena al Melsugen de la Bundesliga y no podía estar en El Cairo, por lo que llevé buena parte de la preparación de cara a la Copa de África», señala satisfecho Garabaya, que se muestra encantado de estar enrolado en el conjunto egipcio «porque es país en el que se trabaja muy bien el balonmano a todos los niveles». Sin ir más lejos, Egipto cuenta con un cuarto puesto en unos Juegos Olímpicos, los últimos de Tokio, y alcanzó los cuartos de final en un Campeonato del Mundo. A ello se unen otros éxitos a nivel de base. «Ya lograron varias medallas en mundiales júnior y de categoría juvenil», asegura, por lo que, a su juicio, «cuenta con un gran futuro de cara a los grandes campeonatos».

El exinternacional asturiano, que como jugador militó en la élite durante más de dos décadas, tiene ahora un doble desafío porque la próxima temporada dirigirá al Balonmano Sinfín de Santander de la Liga Asobal. Será, junto a Jacobo Cuétara, el segundo técnico del Principado en la máxima categoría del balonmano masculino español.

Garabaya, que intentará compatibilizar su cargo en la Selección de Egipto, es consciente de que «será todo un reto entrenar en la cancha del histórico Teka a un conjunto que cuenta con una gran tradición de balonmano y que tiene una de las mejores aficiones de España». No obstante, el que fuera un brillante pivote del Barcelona y del Ademar, entre otros equipos, reconoce que «tengo un plantilla corta y tocará sufrir para mantener la categoría».