Laura Fuertes levanta el cetro nacional

En los Campeonatos de España, disputados en la localidad murciana de Los Alcázares, la gijonesa tuvo que superar dos combates en los que se midió a sendas compañeras del equipo nacional, amigas en el día a día pero rivales en ocasiones puntuales como son esos combates, diferentes por el grado de conocimiento mutuo que existe entre ambas contendientes.

En la semifinal del sábado Laura Fuertes resolvió un reñido combate ante la jienense Marta López. Fue un duelo muy cerrado, de decisión dividida, que finalmente cayó del lado de la asturiana. «Nos conocemos mucho de entrenar todos los días juntas. Era nuestra segunda pelea. No queríamos arriesgar ninguna, pero al final me pude hacer con la victoria», resume Laura sobre la cita en semifinales ante Marta López.

Dos días más tarde, ya en la final, su oponente volvía a ser otra compañera en el combinado nacional con la que entrena en Centro de Alto Rendimiento de Madrid. Hablamos de María González, boxeadora madrileña que compite por Castilla-La Mancha. La lucha volvió a ser muy bregada, con un combate que tendió hacia una batalla táctica entre ambas boxeadoras, un choque de estrategias cual partida de ajedrez. «También nos conocemos muy bien, de hace mucho tiempo. Esta fue la séptima pelea que nos ha enfrentado. Fue un buen combate, con una rival muy técnica. La verdad es que estoy muy contenta ya que al final me pude hacer con el campeonato», analizó la vencedora.

Laura Fuertes acumula un importante palmarés pese a llevar tan solo cinco años en el mundo del boxeo. En el mismo destacan logros como la medalla de oro en el Boxam de 2018, el bronce en la edición de 2019 y la plata en la de este año. Además, la pupila de Oliver Sánchez, ha obtenido dos quintos puestos en los Europeos de 2018 y 2019, dos campeonatos de España Élite en 2018 y 2020 y tres campeonatos de España de clubes con el Asturbox en 2015, 2017 y 2018, entre otros galardones.

La joven gijonesa se define como una boxeadora a la que le gusta trabajar el combate desde la distancia, prefiere evitar el intercambio de golpes y ceñirse a las peleas más estratégicos. Pese a verse afectada por la pandemia, Laura reconoce haber salido más reforzada de la misma: «Lo más difícil para mí fue no tener unas fechas especificas para poder entrenar con normalidad. Creo que a mí me afectó bastante, pero al final sí que nos pudimos concentrar para entrenar y no estar en tanta desventaja con los boxeadores de otros países. El confinamiento fue complicado, hasta que llegó un punto en que mi cabeza hizo click y ahora me siento más fuerte que nunca».

Una de las experiencias que ha marcado la carrera deportiva de la gijonesa es, sin duda, su participación en el Mundial de la India en 2018. «Fue un sueño hecho realidad. España nunca había participado con cuatro boxeadoras. Poder vivir algo así en mi primer año élite, con el viaje a la India, tantos países participando, un ambiente muy especial. Fue algo increíble. Guardo un buenísimo recuerdo de esa experiencia», explica esta joven, acostumbrada a derribar barreras.

La hoja de ruta de Laura Fuertes pasa por la próxima participación en la Liga Iberdrola en Alicante, donde librará tres combates. Tras la pausa navideña para estar con la familia, el 3 de enero es el día programado para la vuelta al trabajo en un año 2021 marcado por la cita olímpica.

«Estar en Tokio es difícil pero no imposible. También dependemos del sorteo, pero creo que estamos en el camino para lograrlo. Hace poco en un torneo en Bielorrusia me volví a enfrentar a la ucraniana Hanna Okhota, con la que perdí en el Europeo, y le pude plantar cara. Creo que nos llevamos el combate aunque las puntuaciones no dijeran lo mismo».